Mi guerra con VODAFONE

Yo solía contratar todos los veranos con Vodafone un pen, a nombre de  mi mujer,   para poder conectar  desde la alquería el ordenador portátil.

Hemos sido clientes de esa multinacional, en verano, durante  años,  y durante muchos más años nuestros teléfonos móviles los hemos tenido con esa compañía, pagando puntualmente todas las facturas.

Todo fue bien hasta el día en el que decidimos aunar el servicio de internet del ordenador de casa y el de los dos móviles que teníamos en Ono, decantándonos por esta última compañía por darnos la oferta más barata. Ahí comenzaron nuestros problemas.

Nos dieron mal las instrucciones para liberar los móviles y nos facturaron por ello. Mi rechazo a pagarles por un servicio mal prestado quedó solo en una clave recibida por teléfono que no sirvió de nada. Me facturaron 24 euros en un cargo que les devolví y me pasaron a una empresa de morosos.

Ya era una cuestión de honor y decidí no pagarles. Empezaron entonces unas series de  llamadas que, según tengo anotadas, llegaron a ser hasta 13 en el mismo día, desde las nueve de la mañana hasta casi las diez de la noche. Había que hacer frente a aquello por la vía de reclamar a través de la oficina de consumidor y responder a esas llamadas telefónicas con humor, para no caer en un estado depresivo. Anoto algunas de mis respuestas:

-¿Ha dicho Vodafone? Lo siento pero este teléfono cuando escucha esa palabra se corta automáticamente. Piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiip.

-Vous parlez francais? Dou you speak english? Parla valencià? Yo no entenderrr casteano, no casteano.

-¿Pregunta por Mari Carmen? Espere que le paso. A ver… Alicia el 1... Tere el 2… Consuelo el 3….

-¡Mari Carmen no está pero si quiere le paso con el Pato Donald. ¡Hola, soy el pato Donald!

-Le digo que soy Mari Carmen y por la ley de protección de datos me pide Ud. el núm. de DNI. A ver… es el 18…, 18…, 18… Ayúdeme porque no sé si ahora viene un 1 o un 2 ¿O tal vez una x?

-Frutería Piturrín. Dígame si quiere peras o manzanas. Mari Carmen no tenemos ¿peras o manzanas?

-Servicio telefónico del mago Disfrutín, especialista en consultas sobre  salud, dinero y amor. Si su consulta es de salud diga “Rajoy me jode”. Si su problema es de dinero diga “Urdangarín”. Si su consulta es de amor agáchese, bájese  los pantalones y espere.

-Este es un servicio de atención al hijo de puta. Para seguir hablando es necesario que Ud. se identifique como tal. ¡Dígame!

-Oh, lo siento, Mari Carmen no está pero si quiere le paso con Dolores o con Alicia o con…

-Soy el mayordomo de la Señora ¿en qué puedo servirle? Ah, no, no puedo pasarle  porque la Señora me tiene prohibido que le pase  con indeseables.

-¿Su llamada responde a que Ud. quiere ligar conmigo? No es Ud. mi tipo. Lo siento.

-Había una vez una ratita que limpiando en su casa se encontró una moneda…

Tras una largo repertorio de llamadas, a veces cada dos horas, por la mañana, a  mediodía y por la noche, opté finalmente por cantarles “la cabra” una y otra vez. Así he actuado los últimos 15 días.

La reclamación que les hice a través de Consumo no tuvo respuesta. Una segunda reclamación tampoco. Fue entonces cuando la funcionaria del Ayuntamiento me indicó que me dirigiera al Ministerio de Industria y Energía aportándoles la documentación que dispusiese. Mandé allí una carta certificada y a la semana me respondieron: “Abrimos expediente. Solicitamos informe a Vodafone España”. Otra semana más y en mi cuenta aparecieron ingresados los 73 euros pagados inicialmente, más 9 de la no liberación del móvil. Además, la deuda que me estuvieron reclamando insistentemente durante más de cuatro meses  también quedaba anulada.

Me han hecho perder el tiempo y, aunque al final han rectificado, siento la satisfacción de haber ganado mi particular guerra con una poderosa empresa de comunicaciones. La he vencido en  una lucha desigual  que normalmente ganan  siempre ellas  y pierde la parte más débil por aburrimiento o falta de constancia.

LA ARENA Y LAS FIESTAS DE LA MISERICORDIA

Me resultar incomprensible que para la celebración de un acto religioso, en mitad de las fiestas  de la Misericordia,  se asuma por parte del Ayuntamiento el coste de retirar la arena del recinto taurino y luego el de volverla a esparcir. ¿No sería posible celebrar el acto religioso al principio o al final de las fiestas o celebrarlo por calles en donde no haya arena o que los fieles caminaran sobre la arena como yo camino  habitualmente todas las mañanas en la playa?

SUBVENCIONES

Díganme si no es absurdo que haya subvenciones (y crédito) para adquirir un automóvil y no las haya para comprar una vivienda ni para invertir en una finca agrícola. ¿Que el automóvil genera puestos de trabajo? …Y la agricultura… y la vivienda.

El Estado, con sus recursos limitados, apoya a los sectores que cree conveniente y se decanta por los más influyentes.