¡Se acabó!

Hemos soportado estoicos, dos semanas de campaña electoral, más cívica y menos sucia y ruidosa que aquella de 1979 en que paredes y fachadas amanecían llenas de carteles, pancartas y pasquines y donde improvisados vehículos con megafonía no paraban de martillearnos el oído interno con músicas y mensajes estridentes.

Me alegro enormemente que el único problema que ha trascendido a la opinión local, haya sido la colocación de una pancarta, delante,  detrás, arriba o abajo de otra, lo que demuestra el grado de tolerancia entre las distintas formaciones,

Como siempre ocurre en estos casos, ha sido el pueblo soberano con su voto del día 22 quien ha declinado la balanza hacia uno y otro lado. Los distintos partidos ya estarán analizando que han hecho bien y si son inteligentes, todo aquello que durante los cuatro últimos años han estado haciendo mal.

Vamos a recordar lo acaecido en las elecciones de 2007 y así podremos hacer un estudio comparativo global de lo que ha dado de sí, este reciente plebiscito.

Con un censo electoral de 23.559, votaron 15.762 (66’90%) y la abstención fue de 7.797 (33’10%).

15.682 votos válidos (99’49%) de los que 15.396 votos a candidaturas (98’18%) y 286 votos en blanco (1,82%).

Solo se contabilizaron 80 votos nulos (0’51%).

Ahora vamos a comprobar el resultado provisional que nos ha facilitado la junta electoral, de las elecciones 2011, a expensas de las impugnaciones que puedan presentarse, ante el recuento final del miércoles 25.

Censo electoral de 23.777, votaron 15.551 (65’38%), con una abstención del 34’62%.

Votos válidos 15.246 (98’04%), de los que 14.771 (96’88%) fueron a candidaturas y 475 (3’12%) en blanco.

Se contabilizaron 305 (2’00%) de votos nulos.

No se puede negar la evidencia de la victoria holgada del PP que ha mantenido la mayoría absoluta, en cuanto a número de concejales conseguidos, con casi idéntico porcentaje al de las elecciones de 1999 que consiguió el 44’69% de los votos válidos.

Tres mayorías absolutas consecutivas, nunca conseguidas por ningún partido en Burriana, son un bagaje más que suficiente para darles la más efusiva de las felicitaciones, a sus militantes y a todos los integrantes de la campaña electoral.

Con la inclusión en sus listas de la anterior concejala de CV, quizá confiaban en aumentar su mayoría absoluta en 1 edil más para los próximos 4 años, pero el aumento de electores solo ha sido del 1’97%  lo que les ha supuesto quedarse como estaban.

Después de analizar los porcentajes y teniendo en cuenta que la adjudicación de los concejales viene determinada por la aplicación de la ley de Víctor d’Hont, en la que se determina que el listón electoral sea del 5% para obtener un primer escaño, si sumamos los votos nulos más los en blanco, suponen un 5’12% que hubieran supuesto un concejal que se descontaría de la lista más votada.

Habría que estudiar el porqué de tanto voto nulo con papeletas del PP, (más del 90%), llenas de tachaduras y mensajes de protesta, aunque esto sería motivo de una reflexión que corresponde al propio partido, no a mí.

También habría que dar otros alicientes a la ciudadanía, para que los votos en blanco fueran a las candidaturas y que la abstención quedara reducida a algo simbólico.

Por otro lado la suma de los votos del BLOC, más los de ERPV encabezada por un antiguo candidato de los primeros, es del 6’11%. El slogan de campaña de “Un vot a ESQUERRA, fot al PP”, se ha convertido en “Un vot a ESQUERRA, li dona majoria al PP” ya que si no se hubieran presentado por separado, el resultado hubiera sido 10, 7, 3 y 1 para el BLOC.

El PSOE, con la que le estaba cayendo a nivel nacional, con las desafortunadas políticas económicas del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, ha tenido un descenso del 4’84%, lo que le ha supuesto perder un concejal.

Comparativamente con otras ciudades de la comunidad, han sabido aguantar relativamente bien el chaparrón, estando muy por debajo de la media nacional que ha acelerado el proceso de desaparición del partido, a nivel representativo nacional de la primera línea de las instituciones.

La situación de CV, ha sido testimonial con un 3’62% y quedando relegada para próximas elecciones.

La sorpresa ha venido de la formación local CIBUR que aunque no contaba mucho para la opinión pública, ha aumentado en un 6’23% sus votantes. En votos absolutos han pasado de 995 a 1.917, lo que les ha supuesto tener de 1 a 3 concejales. Leo hoy en la prensa que es el partido local de la provincia de Castellón que ha tenido mayor incremento de votos. Deben felicitarse por ello.

Algo habrán hecho bien para haber conseguido tal incremento, ya que las primeras encuestas de intención de voto, antes del inicio de campaña, les auguraban mantener el escaño que tenían y al final del plebiscito han triplicado su representación.

Habrá que seguir observándoles durante esta legislatura, al igual que al PSOE, ambos como únicos grupos de la oposición y al PP que tiene la responsabilidad de gobierno, como gestionan los recursos que aportamos todos los ciudadanos con nuestros impuestos.

Esta mañana he escuchado a Mariano Rajoy, dando consejo a los cargos electos para que reduzcan los gastos superfluos. “Austeridad y prudencia” son las dos exigencias que ha trasladado a los que están llamados a asumir  gobiernos locales y autonómicos en nombre del PP.

También ha querido dejar claro que “gobernaremos para todos. Nadie se sentirá excluido por no ser del PP. Gobernaremos para el interés general”.

Esperemos que así sea durante estos próximos cuatro años, por el interés de mi ciudad que es Burriana y así lo van a certificar 6.810 votantes.

Mi enhorabuena al partido ganador, a todos sus representantes electos y a los de los otros partidos con representación municipal.