El desamparo de la zona marítima
En estos días en que muchos ciudadanos intentan paliar los calores estivales haciendo mudanza para estar más cerca del mar, y a un año de unas elecciones que se esperan muy disputadas, es un buen momento para comentar las mejoras ejecutadas en nuestro frente marítimo, sin duda lo mejor que Burriana tiene, así como si nuestros gobernantes han cumplido con las expectativas que la ciudadanía tiene desde hace años.
Llevamos mucho tiempo hablando de inversiones importantes en nuestra costa y, desgraciadamente, muy pocos resultados se están viendo con el transcurso de los años. No parece que ahora sea el momento de reflejar lo realizado por quienes ya estuvieron en el gobierno municipal y no cumplieron con lo que de ellos se esperaba, los ciudadanos ya los enviaron a la oposición por ello. Es pues el momento de centrarse en lo que el actual equipo de gobierno, que lleva ya 7 años en el poder, ha realizado o ha prometido en esta zona.
Empezaremos el recorrido de nuestra costa por la Serratella, donde pocos avances se han producido en el Plan Especial de la Marjalería, iniciado allá por el 2009, ahora paralizado y sin las ideas claras para seguir avanzando, a pesar de las facilidades que la reciente legislación autonómica ha propiciado para que se pueda urbanizar la zona y legalizar las viviendas en el suelo no urbanizable.
En la zona urbana de la Serratella, está también sin terminar la completa urbanización de la UE 30-31, a la que hace 7 años le faltaba solo la instalación eléctrica y que todavía, a día de hoy, no está ni siquiera iniciada. Y eso que están aprobados más de 250.000€ desde hace 5 años en el presupuesto municipal para terminar estas obras.
Siguiendo más hacia el norte, nos encontramos en la zona sur del Puerto hasta la depuradora, en la que muy poco se ha conseguido, a pesar de las recientes visitas a Madrid, para la ejecución de una nueva escollera y la generación de una playa de unos 800m de longitud, prometidas desde la primera década del siglo. En la actualidad, solo se dispone del proyecto básico y sigue sin estar aprobada la evaluación ambiental. Con un poco de suerte, con toda la tramitación que queda pendiente, dentro de otros 4-5 años se podrían licitar las obras.
Llegados ya al Puerto, nos encontramos en que no se ha visto ninguna mejoría en estas dos legislaturas, tan solo promesas y más promesas de la nueva urbanización del vial de la Avenida Mediterráneo desde la Escuela del Mar a la rotonda de entrada. Hace más de 4 años se publicitó un gran proyecto al que llamaron Burriana Port Ciutat, que incluía esta urbanización y la del actual recinto de festivales, a cargo de la Consellería de Obras Públicas, pero muy poco se sabe ya que hace muchos meses que nada se publica, pero lo que está claro es que no existe fecha de licitación ni en este año ni en el siguiente.
Tampoco parece que haya ningún avance sobre el nuevo ambulatorio del Puerto, cerrado desde principios de 2020 por falta de acondicionamiento a causa de la COVID. El equipo de gobierno se dedica cada mes a dar una nueva ubicación, primero en un solar del barrio de los pescadores, después al lado de la iglesia, más adelante en el edificio de la Cofradía y, la última, en una parcela dentro del recinto del Puerto. A ver si al final se toma una decisión y sobre todo, se ejecuta, que ya va siendo hora. La necesidad es tan evidente que hasta la propia Asociación de Vecinos del Puerto ha iniciado una cruzada estos meses reclamando urgentemente la apertura de la nueva instalación.
En esta zona, quizás la única novedad en estos 7 años ha sido la de instalar el nombre de Burriana en letras grandes en la rotonda de llegada al Puerto, cuando la vista de la ciudad se tiene a sus espaldas y no de frente, como suele ser habitual en otros muchos lugares. Por lo menos, hay que decir que el conjunto artístico ha quedado bastante bien.
Siguiendo nuestro recorrido nos encontramos con la zona del Arenal, más de 50 años sin desarrollar y en la que el actual equipo de gobierno, como se le ha echado el tiempo encima, ha tenido la ocurrencia de plantear el desarrollo de una superficie de solo 8.000m2 de los 250.000m2 totales, sin tener bien definido lo que pretende en toda la zona y sin tener el planeamiento urbanístico que lo sustente, ya que el anterior se anuló en el año 2016 cuando inició su andadura en el Ayuntamiento. En el último escrito de este blog ya se dio cuenta con más detalle de esta situación: https://www.elperiodic.com/opinion/reinventar-burriana/arenal-merece-esto_8415
Tampoco hay ningún avance en la ejecución del vial de la Avenida Mediterráneo desde el Puerto al Grao, con el estudio de soluciones iniciado en el año 2017 y el proyecto a principios de 2020, pero parece que nadie se atreve a decidir la solución a adoptar y se mantiene en hibernación desde entonces, a pesar de contar con una partida de más de 800.000€ en el presupuesto municipal del año 2021. Así y todo, la solución que se está estudiando solo llega a la calle Juan Carlos I, al inicio de la Malvarrosa, dejando sin definir el resto de la Avenida hasta el Grao.
Llegados al Grao, la evidencia de que nada se ha realizado en estos últimos años es muy clara, todo sigue igual que siempre, ni tan siquiera se han asfaltado los aparcamientos en batería frente a la playa, que ocasionan muchos problemas a los usuarios en épocas de lluvias, eterna demanda de la Asociación de Vecinos del Grao.
Avanzando un poco más, se llega al Clot de la Mare de Deu, cuyo mantenimiento del arbolado está dejando mucho que desear a pesar de algunas inversiones realizadas conjuntamente con otros organismos públicos. Quizás lo que esté faltando es un plan global para toda la zona y no las pequeñas actuaciones que se vienen realizando, que no solventan los problemas de fondo. Lo que podría ser un paisaje idílico por el entorno y lugar de encuentro de muchos ciudadanos, no es accesible nada más que en el estrecho vial de tierra que circunvala el paraje.
Seguimos, antes de llegar a la zona de les Terrases y Sant Gregori, con la falta de una pasarela estable en la desembocadura del río, que en estos últimos tiempos ha habido que reponer en 3 o 4 ocasiones cada año. En la actualidad, esta actuación tan necesaria, se encuentra en fase de licitación de las obras, después de un incomprensible trámite de aprobación que ha durado más de dos años. Esperemos que pronto empiecen los trabajos y se resuelva un problema anclado desde hace mucho tiempo, aunque no hay que olvidar que la solución más adecuada y de futuro es la realización del puente previsto en el PGOU, a la altura de la Avenida de la Constitución, que comunique de forma permanente las zonas del Grao y la futura de Sant Gregori.
En esta zona de Sant Gregori las obras ya han comenzado, pero de forma muy lenta y con demasiados problemas con algunos propietarios y demasiado ruido de fondo, lo que da la impresión de que no se está sabiendo desarrollar eficazmente el Proyecto. Aparte de ello, las escasas gestiones del consistorio tampoco han conseguido avances en el Proyecto de la Remodelación de la Costa, que sigue parado en el Ministerio sin que se tome ninguna decisión al respecto sobre las varias soluciones proyectadas, a pesar de ser fundamental para la viabilidad de toda la urbanización.
No cabe duda que el recorrido de nuestros 11 km de costa ha mostrado un paisaje desolador en cuanto a las necesidades que Burriana sigue teniendo desde hace muchos años. Todavía está casi todo por hacer y en estas dos últimas legislaturas, ya van demasiadas igual, no se está yendo más allá de las promesas de siempre.
Todavía queda un año para las próximas elecciones locales, aunque parece muy poco tiempo para que se noten avances importantes. A pesar de ello, espero que se intente. Y si este gobierno no sabe hacerlo, pues … que entre el siguiente.
Mucho ánimo en el empeño.