Serrat: mucho más que un cantautor
Serrat se despide de los escenarios. Pero gracias a la técnica, podremos seguir disfrutando de sus canciones. Canciones qué tendrán que pasar muchos años, antes que desaparezcan de la memoria colectiva. Ello es así, porque para muchas personas, ha cantado canciones que han sido muy importantes en su vida, hasta el punto de removerles lo más profundo de sus sentimientos al escucharlas. Además, se ha convertido en un artista de referencia intergeneracional de España y América Latina. Se dice que aportó luz y color a las libertades por dondequiera que haya ido; que sus letras han hecho revivir, los más sentidos recuerdos; que fue un genio de contar las cosas y de cantar los sentimientos. Ejemplo de ello, fue su primer gran éxito, (Cançó de matinada) donde describe el amanecer, de la sociedad rural de los 60, con su pastor, agricultor, sus carros y las señoras acudiendo a la iglesia. La misma canción Mediterráneo y otras. Serrat ha sabido contar historias que hemos vivido todas y todos. Canciones que muestran, el amor, lo cotidiano de cada día, la atención a tus allegados, el respeto a los mayores, el cuidado de los menores, la importancia de ser libre y honesto.
Serrat, no solo es un buen cantante, un poeta excelente y gran narrador. Pues, en materia del medio ambiente, fue un adelantado a su tiempo. En 1973, cuando la preocupación por la naturaleza era escasa, él compuso y grabó “Pare”. En esa canción, se dirige a Dios como Padre quejándose de la destrucción progresiva de la naturaleza. Le expresa su tristeza por la destrucción que los humanos hacen del medio ambiente, y le ruega que actúe y lo evite. Además, lo expresa, con su habitual, carga poética, llena de ternura. En “Pare” Serrat inicia una crítica a los gobiernos que ceden, ante los poderes económicos privados, y permiten la destrucción de la naturaleza. Esa crítica tiene su continuación de forma más expresa y menos simbólica en “Plany al mar”. En esa canción, referido al mar Mediterráneo dice: “Mireu-lo fet una claveguera. (…) Ferit de mort. Per ignorancia, per imprudencia. Per inconsciencia i per mala llet.”
Ya en 1973, en la citada canción, en su inicio, dice: “Pare, digueu-me que li han fet al riu que ja no canta”. Al final concluye: Pare, que estan matant la terra. Pare, deixeu de plorar, que ens han declarat la guerra”. Ahora en nuestros días, habla sin tapujos del cambio climático y la destrucción de los océanos, como los principales desafíos a los que tiene que hacer frente la humanidad. Se lamenta, que el Mediterráneo luminoso de su infancia, se ha convertido en “un sarcófago” donde cada año desaparecen miles de seres humanos.
Mientras el Serrat artista es admirado por todos los sectores sociales. Así se deduce del hecho, que ya en los años 60 y 70, triunfaran en toda España, con sus temas en catalán y en Catalunya con sus temas en castellano. Sin embargo, políticamente el ciudadano Serrat siempre ha resultado poco de fiar, igual para los nacionalistas españolistas como los independentistas. Los nacionalistas españolistas mantienen sus sospechas, porque siempre ha cantado en catalán, lo mismo ocurre con el nacionalismo catalán, porque canta en castellano. También tiene mucho que ver, el que sea federalistas. Serrat ha sido siempre una persona comprometida y que ha dado la cara por los más vulnerables y las libertades. En 1970 no tuvo reparos en encerrarse el Monasterio de Montserrat para protestar en contra del Consejo de Guerra de Burgos, junto otros artistas. Su protesta contra los últimos fusilamientos del franquismo en 1975 le costó el exilio en Latino América. Hace unos meses se le pudo ver en el puerto de Borriana con personal de Open Arms y de la ONG local Aurora Suport, con los cuales se fotografío, mostrando su apoyo a las labores de rescate de los inmigrantes que llegan por el Mediterráneo.
“Pare” ha sido una canción constantemente interpretada por Serrat. En los 80, solía presentarla con estas palabras:
“Aún hay mucha gente que, lamentablemente, confunde lo que es el paisaje con lo que es la Naturaleza. Gente que, aunque no trate necesariamente mal el entorno en el que vive, lo miran como si fuera algo ajeno siempre, y como algo ajeno lo tratan; como tratarían a un cuadro bonito que tienen colgado ahí, en el comedor de su casa, y al que de vez en cuando hay que sacarle el polvo. Pero la experiencia nos ha demostrado claramente que nosotros no somos una cosa y la Naturaleza otra, sino que en el mejor de los casos nosotros somos Naturaleza y que es ella la que nos acoge y la que nos incluye. Y que amar y defender la Naturaleza no es otra cosa que amarnos y defendernos a nosotros; porque nuestros caminos van unidos, como están unidas las raíces del olivo y la tierra; como están unidas las historias de los auténticos amantes. Por eso defender la Naturaleza no es más que actuar en pura defensa propia, porque nadie podrá salvarse sin salvarla a ella. Porque todo lo que a ella la hiere nos hace sangrar a nosotros.”
Solo me queda agradecer a Serrat, por tanto de lo que nos ha aportado.
