Un reencuentro eterno
Los alcoyanos y alcoyanas nos despertamos en este 8 de septiembre con la triste noticia del fallecimiento de Camilo Sesto. Muy pronto era compartida por miles de personas y tanto en las redes sociales como en las relajadas tertulias de un domingo el fallecimiento de Camilo se convertía en el centro de atención.
Y es que Camilo Sesto, Camilo, porque en Alcoi basta con pronunciar su nombre para saber de quién hablamos, ha sido el artífice de la banda sonora de la vida de varias generaciones. Sus canciones han sido, son y serán la compañía perfecta de recuerdos y sentimientos, que ya se han convertido en inmortales para perdurar en el tiempo y seguir acompañando momentos y vivencias.
Son las canciones de un alcoyano irrepetible, único y universal, con reconocimientos internacionales, que ha ejercido la alcoyanía allá donde ha ido, pues ha estado presente en todos y cada uno de los lugares que ha visitado y de las palabras pronunciadas, siendo una de las personas que ha contribuido de manera firme a que el nombre de nuestra ciudad haya traspasado fronteras.
Una ciudad que en 2016 tuvo la oportunidad de mostrarle su infinito agradecimiento por todo lo que ha supuesto para muchos alcoyanos, y la concesión de la Medalla de Oro de la Ciudad y el título de Hijo Predilecto se convirtió en un acto multitudinario, en el que el artista pudo sentir el cariño de su pueblo, de su gente, respondiendo de igual manera. La Corporación municipal, por unanimidad, acordó estos reconocimientos, destacando que es el artista más internacional nacido en Alcoi y digno merecedor de las máximas distinciones institucionales de la ciudad, y ahora los recuerdos de los momentos compartidos con Camilo nos vienen a la memoria y despiertan nuestros sentimientos.
En ese momento hablé del reencuentro de Alcoi con Camilo, un reencuentro que siguió hace tan solo unos meses, cuando en noviembre del año pasado una de las principales vías de la ciudad pasaba a llevar el nombre de Alameda Camilo Sesto. Su presencia en la ciudad, para descubrir la placa que da nombre a esta avenida, volvió a ser un acto multitudinario y emotivo, en el que se sintió el calor de los ciudadanos hacia Camilo, así como el del artista hacia sus vecinos. Recuerdo sus palabras: “tengo el corazón en un puño, de agradecimiento a todo lo que es y significa ser alcoyano. Cada vez que paséis por aquí, y piséis la acera y la calle, y os acordéis de mí, mi corazón seguirá palpitando y diciendo: qué orgullo ser de Alcoi”. Para todos nosotros también es un honor que Camilo sea alcoyano y que como tal haya ejercido a lo largo de su vida, viviendo un reencuentro que pasa a ser eterno.