La Concertada es un derecho

Ante el decreto de la Conselleria de Educació de desestimar y de suprimir el concierto educativo en el 1º de Bach. en el colegio Mater Dei, como Director Titular, me gustaría recoger la sensibilidad manifestada por las familias, docentes y alumnos afectados:

A nuestras familias sí que les ha afectado esta decisión, así se manifiestan los padres del Mater Dei que hace años eligieron este modelo educativo para sus hijos, y ahora, se les niega el concierto para acabar sus estudios de bachillerato en el centro. Y los alumnos, sus hijos, se sienten desencajados porque en el orgullo de ser Mater se les ve cortada su libertad. Ya han elegido y otros quieren hacerlo por ellos. Sí, se trastorna a las familias porque "hemos elegido y hemos optado por este modelo concertado". Se vulnera el derecho constitucional de los padres a su libertad de escoger la educación para sus hijos.

Y se entiende mal y usa peor el concepto de subsidiariedad. El derecho es de los padres y todos somos subsidiarios de ellos, y ambos modelos, público y concertado, complementarios. No vamos contra nadie. Hay que garantizar la educación pública, universal, gratuita y de calidad, que no se hace yendo contra la concertada, sino conciliando ambos modelos amparados por la Constitución. No se mejora la pública a costa de la concertada. Y lo digo yo que me eduqué en colegio e instituto públicos, de los cuales conservo gratos recuerdos y sentida gratitud.

Sr. Conseller, no es "una anomalía" el concierto de bachillerato, sino un avance social y el mejor garante de la libertad. No es un privilegio, sino un servicio en justicia ¿Por qué no cree verdaderamente en el respeto y la libertad? ¿Por qué tanta imposición ideológica en lo que debe ser la educación de los niños y jóvenes como quieren sus padres no como lo marque usted?

No busque usted fuera modelos educativos que ya disfrutamos aquí. No busque lo que tenemos entre nosotros. Pero requiere corazón y autoestima. Soy testigo de cómo los profesores de mi centro, y de la concertada, se ponen al día. La cultura del esfuerzo y los valores, las cuestiones pedagógicas, metodologías innovadoras que ilusionen para afrontar, no solo el absentismo escolar, sino que pongan las bases de la renovación y el pacto escolar. Huya de la radicalidad y la exclusión, acogiendo con las puertas abiertas el diálogo, es el camino. Nada puede hacerse sin las familias. Más aún, nada puede hacerse contra las familias.