Dos años ante el abismo
En los dos años transcurridos he puesto algo más en mi blog, pero gente mucho más cualificada ha insistido en las razones estructurales del desastre y el efecto de W (doble V) que tendrá si no se toman medidas incluso sistémicas. El Gobierno de España y de Zapatero ha pasado de no reconocer la crisis a decir que ya la tiene solucionada gracias a las decisiones tomadas, ninguna de las cuales se ha ejecutado. ¡Que alguien me lo explique!
Porque la cacareada reforma laboral, la financiera, la más importante en la enseñanza, la administración de justicia, la productividad, el modelo autonómico/federal, la deuda privada y la pública, incluso el control del gasto público, todos son papeles enunciados en un titular un día y vuelto al cajón al día siguiente por no herir a este colectivo o por no tener claro para qué se hacen. La improvisación y la pasividad es tal que las mayores críticas internacionales a la actuación de Rodríguez Zapatero no vienen por las decisiones tomadas, sino por qué no saben qué quiere hacer con un país en crisis. France Soir le criticaba más duramente hace un mes porque no sabía qué hacer con la presidencia temporal de la Unión Europea.
Porque al final el problema ya no es la crisis, que lo es. El problema es que no se hace nada por enfrentarse a ella. Llegaremos a los cinco millones de parados (ya estamos en ello) y el Gobierno de España y de Zapatero seguirá diciendo que prepara un paquete de medidas para aliviar la situación, cuando ni siquiera los famosos 420 € a los parados sin subsidio han servido para algo más que aliviar la agonía de los que nunca más volverán a encontrar trabajo. ¿No hubiera sido mejor fomentar el empleo hace dos años en lugar de subsidiar el desempleo?
Ahora hay un plan de austeridad que parece el de la señorita Pepis. 50.000 millones sobre el papel a base de suprimir sobre el papel direcciones generales cuyos sueldos reaparecerán mañana en otro departamento. Y como no se lo creen, tampoco pueden liderar la austeridad de otras administraciones (autonomías, municipales y provinciales) que son dos tercios del gasto en España.
Así que dentro de dos años volveré a revisar mis blogs y los de otros. Y las mil propuestas de las agencias de valoración y lo que habrá dicho Felipe González, Almunia, el presidente del Banco de España o el FMI y la conclusión será la misma. A lo mejor hemos crecido un 0,5 por ciento del PIB, pero seguiremos expuestos a seguir con el paro y la crisis a cuestas porque no hemos curado ninguno de nuestros males. Seguiremos al borde del abismo. Eso si: Zapatero volverá a ganar las elecciones.
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