La eutanasia y la crisis económica

Muchas veces se ha opinado sobre la eutanasia y generalmente cuando se ha sometido a votación en las cortes siempre se ha optado por el NO, aunque económicamente sea rentable para todos desde el punto de vista económico, ya que el que muere deja de cobrar y no produce gastos en la caja de la seguridad social.

Hace 20 años pensaba que me afectaría mucho ver a mi familia sufriendo por mí, si realmente me encontrara en fase terminal y no pudiera tener una calidad de vida que me permitiera seguir disfrutando de mis seres queridos, yo era partidario de la eutanasia.

Cuando los años se acumulan y estamos sanos difícilmente pensamos en la muerte .Pero si analizamos detenidamente nos daremos cuenta que forma parte de nuestra vida.

Hoy he empezado a cambiar de opinión, ¿por qué… pues bien la crisis económica me ha hecho recapacitar, si antes lo veía desde un punto de vista de sufrimiento ahora sería capaz de resistir los años que fueran necesarios para poder ayudar a mis hijos con la paga de jubilado y permitiría que me pusieran los tubos necesarios por cualquier hueco de mi cuerpo para poder resistir a la muerte.

Mientras no se regularicen los desastres económicos que han propiciado los gobernantes de este país destrozando a una juventud que no podrá integrarse en el mundo laboral y que seguramente nunca podrá percibir una pensión digna, esto sí que realmente es una “eutanasia” camuflada.

Seguramente muchos no estarán de acuerdo con estas soluciones, ya que parten del precepto de que el único que da y quita la vida es Dios.

Supongo que con esta decisión ganare o perderé amigos aunque los motivos sean más o menos discutibles ya que la mayoría de los ciudadanos en la actualidad están en contra de la eutanasia.