La ceguera de la enseñanza
La educación y la enseñanza que actualmente esta en un estado arcaico, hemos de empezar a reformar los corazones de la juventud y olvidarnos de los contenidos académicos.
Debemos empezar a aprender a gestionar la diversidad de las aulas que han tomado un sistema de la globalización, hemos de fomentar la inteligencia social y no solo la individual, tomando buenos apuntes de las diferencias culturales, étnicas y sociales.
Los educadores deberán aprender a fomentar el aprendizaje de las emociones positivas y negativas que son comunes en todos los individuos en definitiva gestionar lo que es común a todos.
En estos conceptos entran la rabia, la agresividad, la pena, la felicidad, la sorpresa, la envidia, el desprecio, la ansiedad y tantos otros que son comunes y a la vez pueden diferenciarnos.
Espero que seamos capaces de entender esta ceguera y que los profesionales de la enseñanza lo pongan en práctica.
Todo el planeta atraviesa una crisis, tal vez la mayor desde que el hombre existe, como todas las crisis tenemos la oportunidad de realizar un cambio indispensable para nuestra supervivencia y desarrollo.
En el mundo actual lleno de datos, imágenes y acelerado, necesitamos volver a lo esencial: intelecto, emociones, afectos, espíritu.
Esta es la única manera de madurar como especie y hemos de preguntarnos sobre de que mundo queremos que surja de esta crisis que estamos sufriendo
Al parecer últimamente todos opinamos sobre política y políticos ya que esta a la orden del día y estamos olvidando lo que realmente es importante la enseñanza.