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Per Ramón Jesús Pérez
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Huelga de taxistas

    Hay servicios que por su importancia para la ciudadanía, producen un gran problema cuando estos fallan; los profesionales del taxi, trabajadoras y trabajadores, son personas que también tienen sus derechos, y se han manifestado con las huelgas.

    El colectivo, demanda una serie de reivindicaciones, que son justas; piden "cambios normativos y el traspaso de competencias a las Comunidades Autónomas", es una profesión muy dura por sí misma.

    Estas causas son razones suficientes para ejercer su derecho de ir a la huelga; aunque suponga un gran daño social, dado la comodidad que el taxi supone todos.

    Las huelgas se han repetido de ciudad en ciudad, porque el problema afecta a muchas personas; debemos, ser comprensivos con ellos, entender el servicio que nos hacen y la dureza de su trabajo.

    Siempre están ahí, esperando una llamada, de día y de noche, en cualquier ciudad; es justo que ahora nos solidaricemos con este colectivo que tanta comodidad nos supone; hay que comprender sus necesidades y su precaria situación.

    Esta profesión soporta numerosos riesgos, la sociedad parece desconocer esto, quizá por la despreocupación que todos tenemos de todo; nunca pensamos en ellos; en el gran riesgo que corren.

    Se nos olvida que hacen turnos nocturnos, con el peligro que eso supone; cualquier persona puede pedir un taxi, también un malhechor, y los delitos que se pueden cometer son múltiples; tampoco hace falta que sea de noche, los delincuentes no tienen horario.

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