Dos hechos, dignos de la crónica histórica
>>Debo insistir en que NO son patronales<<
Aún así, las electas corporaciones municipales intentan ponerles su sello, bien modificando horarios, actualizando algún acto, creando de nuevos como el de este año la Ruta del Caracol, etc. etc. Siempre con la mejor de las intenciones.
Mueven ficha en todo aquello que bajo su prisma lo consideran como mejorable, y pienso, que es su obligación. En alguna que otra de las novedosas ideas que van surgiendo, salta la alarma en sentido positivo. Aparece una buena nueva, algo que anotar sobre un acto que deberá prevalecer, mantenerse en los años venideros. Ha sido todo un acierto.
Contando con la amable complicidad de dos extraordinarios fotógrafos de la localidad, Rafael Grifo Lamaza y Ricardo Gallén Gallén, he captado dos puntuales momentos sobre lo que hablamos.
1º CONTINUIDAD DE UNA TRADICIÓN. El momento exacto, la evidencia real documentada mediante fotografía, en que nuestra alcaldesa saca el Cristo procesional en bandolera. Ya lo hizo la pasada procesión de 2.011, siendo inscrito el hecho en la crónica local, como primera mujer de tan alto cargo, que mantiene y respeta la tradición de levantar y traspasar con el Cristo procesional el umbral de la Iglesia Parroquial.
2º.- PRIMER HOMENAJE A PERE XIMEN DE URREA. El pasado 23 de julio, la Corporación e invitados inauguraban la nueva ubicación del monumento a Ximén d´Urrea, siendo un acierto total el traslado realizado del monumento por parte de la Regiduría de Cultura y la de Fomento. Reitero mi personal agradecimiento a la señora Alcaldesa, por cederme parte de su protagonismo en dicha inauguración.
A resultas de esta inauguración y ante las optimas condiciones que tiene el lugar y espacio de Baix la Vila, se estableció que el lunes de fiestas día 27, se realizase un homenaje a la figura de Pere Ximén de Urrea, 1º Señor de la Tenencia y Honor de Alcalatén, que se repetirá todos los años los lunes de fiestas (Día de Almas).
Busto en bronce de un metro de altura. Su autor es Eduardo Cabedo de Castellón y vaciado en Barcelona. El conquistador aparece en él, adusto, guerrero, con casco, cota de malla, espada y clámide. Sobre un pedestal de dos metros de altura de noble y elegante sillería, con dos únicos motivos que rompen su monotonía: el escudo de l´Alcora y la leyenda en placa cerámica descrita al pie.
Realizado ya este acontecimiento, solo me queda catalogarlo de honroso y solemne. L´Alcora debe hacer prevalecer su rico pasado. La presencia de autoridades, reina y dama de fiestas, la Asociación Cavallers d´Urrea y dames d´Alcalatén, y L´Alcora Tambors, le dieron el merecido realce al acto-homenaje a nuestro Pere Ximén. La señora Alcaldesa y la Reina de fiestas depositaron una corona de laurel al pie del Monumento.
Huella prominente de rico legado dejaron sus descendientes en nuestra villa: Ermita del Santísimo Salvador (Ant. Parroquia). Carta Pobla. Propiedad sobre las aguas del río. Iglesia Parroquial. Mercado de los miércoles. Venerable Bertrán. Molinos (harineros y aceite). Convento de San Francisco. Real Fábrica de Cerámica, etc. etc.
Sí, esto es hacer pueblo.