Sobre como se hace “Patria”, y se siente uno orgulloso de ser español
Desde esta humilde tribuna, quiero dar mis más sentidas gracias a los componentes de la Selección Nacional de Baloncesto por el maravilloso ejemplo que nos han dado a todos los españoles de cómo se hace “Patria” de verdad y de cómo se trabaja en equipo en beneficio de la comunidad, sin egoísmos personales, sin individualizar ni regatear ningún esfuerzo, con miras a un único objetivo, que es lograr el objetivo propuesto.
Hasta han sido sublimes en la derrota.
Luchaban por la medalla de oro, de campeones de Europa, como lo hicieron el verano pasado, por el campeonato del Mundo, y en última instancia perdieron la final ante el equipo ruso, y pese al dolor de la derrota, y a verles llorando por no haber podido ganar, continuaban siendo un equipo solidario, esforzado y unido, y cada cual justificaba los posibles errores de sus compañeros porque todos eran muy conscientes de que habían entregado hasta la última gota de sudor, hasta el último gramo de su energía, en busca del éxito, y si no habían culminado en su totalidad lo que se pretendía conseguir, es decir el ser campeones de Europa, no fue por no haberse entregado todos y cada uno de ellos al 100%.
En ese grupo humano, no había gentilicios de las diversas autonomías, sólo había 12 chavales ESPAÑOLES, en mayúsculas, que querían volver a dejar el pabellón de la nación a la que representaban al nivel más alto posible, y por ello lucharon con todas sus fuerzas.
Y a fe que lo consiguieron.
De esos muchachos, tan nobles como desinteresados y solidarios, sí me siento orgulloso.
Ver como los hermanos Gasol, Navarro, Rudy Fernández y Mumbrú se sentían orgullosísimos de llevar la camiseta española, me llenaba de satisfacción, y espero que como a mí, a la inmensa mayoría de españoles, que nos negamos a aceptar que la mayor parte de los catalanes no compartan esos sentimientos con nosotros.
Como los andaluces Berni, Cabezas y Felipe Reyes, el canario Sergio Rodríguez, y el extremeño Calderón o los castellanos Carlos Giménez y Garbajosa, todos desde el primero al último eran españoles por encima de todo, y daban una autentica lección a nuestros Gobernantes autonómicos (que sobre todo en las mal llamadas “nacionalidades históricas”), actúan como “sanguijuelas” del Estado español, y de nuestra Nación Unica, mi querida España, para tratar de lograr todas las prebendas posibles para sí mismos, utilizando como argumento injustificable, los intereses de sus gobernados.
Si ellos me dieron el ejemplo de “solidaridad” en el esfuerzo, ayer, en el Congreso de Diputados, me decepcionaron una vez más, al votar los prepuestos del Estado para el año entrante.
Para poder conseguir el voto favorable de los políticos catalanes, hubo que entregarles a los políticos de esta autonomía según he leído hoy, 600 millones de euros para el ejercicio del 2008, y prometerles otros 4000 cuenta de lo que ellos llaman la financiación según el nuevo Estatuto de Autonomía Catalán.
Un Estatuto que está recurrido en el Tribunal Constitucional, por haber estimado Juristas muy preparados que está lleno de preceptos no constitucionales, y que por lo tanto de momento es sólo agua de borrajas, hasta su aprobación o denegación.
Pero, claro, nuestro Gobierno necesita esos votos, y los paga al precio que le pongan, y entre tanto los españoles de las demás autonomías, no nos queda más que el “derecho al pataleo”… y eso al menos es lo que hago yo.
Sólo hay el dinero que hay, y si en vez de ser solidarios y repartirlo equitativamente, en función de la población española, o de cualquier otro criterio justo y equitativo, e igual para todos, cada uno lleva a cabo la “política de sanguijuela”, lo único que se va a conseguir es enfrentarnos a todos los españoles, como lo están haciendo ahora, y ante eso la única defensa que nos queda a los desfavorecidos, es negarles el voto en cada ocasión que se nos presente a los egoístas, y a quienes se lo permiten y se hacen cómplices de ese egoísmo y falta de solidaridad.
Por eso he querido sacar a colación el ejemplo de nuestros baloncestistas, que tanto en el éxito, como en la derrota, han sabido ser solidarios entre ellos, y dar una lección de cómo se consiguen los fines propuestos.
Remando todos en el mismo sentido, y con un entrenador, sensato, preparado y que sabe sacar el partido máximo, a las capacidades de cada miembro del equipo, evitando egoísmos, confrontaciones e individualismos, que sólo llevan a la disensión y a la anarquía total
Y en ese camino último, esta remando nuestro Gobierno actual, por lo tanto tenemos que tratar de librarnos de sus manejos, negándoles lo único que podemos negarles, que es nuestro voto.