Dar SANGRE……es dar VIDA
Pues bien, recientemente, el dia10 de Mayo, tuve ocasión de ver aquí en Burriana, algo conmovedor, que no vivía desde hace bastantes años, y que nunca viví con tanta emoción e intensidad.
Se trataba de un Maratón de Donación de Sangre, organizado por el Centro de Trasfusiones de la Generalidad, en el que colaboró con singular acierto el Ayuntamiento de Burriana, haciendo una presentación muy digna , a la que no pude asistir, pero de la que me hablaron encomiablemente.
Una amiga personal, Rosmary Ballester, Directora de Promoción del Centro, me llamó para comentarme que ese día se hacían las donaciones, y más guiado por mi alegría de saludarla que por otras razones, me acerqué al Centro de Salud de nuestra ciudad.
Yo había sido donante durante unos 15 años, pero en una ocasión en que asistí a donar a Torrente, el hematólogo que controlaba las extracciones, al comentarle que solía viajar con frecuencia por el Sudeste Asiático, me comentó que no debía donar sangre, porque podía estar incubando alguna enfermedad tropical, y propagarla inconscientemente.
Desde aquel momento, deje de donar y me olvidé del tema……hasta ahora.
Hace ya varios años que no suelo viajar por zonas de riesgo, así que mi amiga Rosmary, me dijo que no tenía ya coartada, y sin ningún esfuerzo me puse de nuevo en la línea de donantes, con una sensación de alivio y confort muy especial.
Sentía que estaba siendo útil y solidario, dando algo tan intimo como mi sangre, a alguien que en algún momento la iba a necesitar de una forma perentoria, sin saber quien podría ser
Fue mi primera donación “consciente”
Pero como yo, me encontré a un montón de personas, de diferente condición y edad, que estaban allí, dispuestas a “dar su sangre…sin saber a quien”, y eso les hace aún más admirables.
Me conmovió ver a una parejita muy joven, ella pálida a más no poder, temerosa y nerviosísima, pero aguantando el tirón, tumbada a mi lado en la camilla, y luego al acabar y salir, tuvo un desvanecimiento. Me encantó el cariño con el que la miraba y la trataba su noviete, quitándole importancia a su desvanecimiento, y dándosela a la necesidad de quien la iba a recibir.
Coincidí y no quiero dejar de mencionarlo, con José Ramon Calpe, con Paco Isach y con Consuelo Suay, mientras daban sangre en las camillas, así como con Vicente Rios Jr. del Gabinete de Prensa del Ayuntamiento, y no me cabe la menor duda de que irían muchos más representantes del Consistorio, pero al no coincidir con ellos, no puedo mencionarles.
Nunca en mi vida había visto colas tan largas……”para dar algo”.
Estuve como una hora desde que llegué hasta que me tumbé en la camilla, esperando turno, y al igual que yo todos los presentes, sin ninguna excepción.
Eso me permitió conocer personalmente a Maria Guinot Martinez, Directora del Centro de Trasfusiones de Castellón, a la que me permito felicitar desde aquí, por la perfecta coordinación del servicio, y la eficacia del personal sanitario y administrativo, que evitaron que nos eternizáramos, en la espera.
También, en la medida que le corresponda hay que felicitar a Consuelo Suay, Concejal de Sanidad de Burriana, tanto por la cooperación suya, como por el detalle de haber estado al pie del cañón, y como donante en “primera línea de fuego”.
Cuando ayer, llamé a Rosmary, para que me hablase de lo que yo ya intuía, me confirmó que Burriana había batido todos los records de solidaridad en donaciones, ya que se habían presentado 240 donantes, de los que por cuestiones de salud, edad e idoneidad se aceptaron 210, siendo 60 de ellos nuevos donantes.
Nunca ninguna ciudad en la provincia de Castellón, ha llegado nunca a esos parámetros.
Y es que puedo asegurar que las 12 camillas disponibles, al menos de 11 a 13,30 de la mañana, no estuvieron desocupadas ni un solo momento, y el personal que estaba trabajando, eran auténticos profesionales, sin descuidar el menor detalle, para que todos nos sintiéramos a gusto y sin presión, tratando de tranquilizar a los mas nerviosos, y pendientes de que nadie , sufriese la menor incidencia.
Pero la mayor felicitación, debe de ser para mis conciudadanos, que dieron una enorme lección, de solidaridad, entrega y alegría, dando lo mejor de ellos mismos (su sangre) sin saber para quien ni para cuando, pero sin dudarlo.
Espero que en las donaciones normales que se suelen repetir la primera semana de cada mes, no decaiga ese ánimo, y Burriana pueda seguir ostentando esa galardón, de noble entre las nobles, y solidaria con sus semejantes.
Miguel Bataller Piera
Clar que poden donar sang, la que ens xuplen amb les pujades de les taxes de l'Ajuntament.