elperiodic.com
SELECCIONA IDIOMA
Castellano
Per Miguel Bataller
Columna de Michel - RSS

¿Mentir…o administrar? Esa es la disyuntiva

    Es lo que hizo el “zapaterismo” en las últimas elecciones.

    Se pasaron toda la campaña electoral mintiendo deliberadamente al pueblo español y convencieron a una mayora relativa, pero… eso fue todo.

    Hoy la mayoría absoluta del pueblo español, esta “convencida” del error de haber elegido a ese “artista de la martingala”, embaucador de ignorantes, prometedor de imposibles y negador de la más diáfana de las realidades, con tal de mantenerse en el poder, al precio que fuese.

    Rebobinen ahora los debates de Zapatero –Rajoy, o de Solbes-Pizarro, en los que, cual “pinochos” del poder, tanto el Presidente del Gobierno como su Ministro de Economía negaban la mayor y se empeñaban en llamar agoreros y catastrofistas a quienes lo único que hacían era ponerles delante de los ojos la incipiente crisis creada por su incapacidad para abordar los problemas económicos y financieros de nuestro Estado.

    Por pura higiene mental, los he vuelto a ver y a repasar detenidamente, para llegar al convencimiento de que tanto Rajoy como Pizarro, sin estar en el Gobierno, conocían mucho mejor que nuestros gobernantes la situación real del país, o al menos eso demostraron.

    En cualquier otro sitio del mundo con una política mediática más independiente, objetiva y sin ser manipulada por el poder, Zapatero y sus muchachos no podrían ni salir a la calle sin correr grave riesgo de ser corridos a tomatazos por esos españoles a los que les han mentido, manipulado y estafado de una forma tan evidente.

    Aquí, aún se permiten seguir embistiendo como cabestros ciegos contra una oposición, que a fuerza de ser tibia y poco contundente, se deja embestir, sin aplicarles la medicina de la Memoria Reciente, de sus embustes y tejemanejes, y permiten que recurran los filibusteros políticos del zapaterismo a una Memoria Histórica de hace más de setenta años, como si los españoles actuales tuvieran nada que ver con aquellos tiempos, cuando ninguno de los líderes actuales del PP habían siquiera nacido.

    Ni el PP existía entonces ni puede ser responsable de lo que ocurrió.

    El PSOE sí existía, y sí fue responsable de las “checas”, de los paseíllos que llevaron a la tumba a miles de valencianos sin otra razón que un odio cerril, que no perdonaba a los que no opinaban como ellos.

    El PSOE sí tiene que hacerse perdonar esa fase funesta de nuestra historia, que todos teníamos superada y olvidada, por no haberla vivido en primera persona ninguno de los españoles de menos de 80 años.

    Pero este deplorable, inmoral, insensato y nefasto Presidente del Gobierno pretende que los españoles recordemos los asesinatos de uno y otro bando de hace setenta años (de los que nadie de los vivos, salvo Carrillo, fue responsable), para evitar hablar de su torpeza, inconsistencia intelectual y moral, para gobernar adecuadamente a un pueblo español que no se merece tener por Presidente a ese personajillo al que el oportunismo y las discrepancias internas de los socialistas pusieron en un lugar en el que nunca pudo soñar.

    Aún sigue negando la caótica situación económica en la que estamos, causada en parte por la coyuntura mundial y agravada por su incapacidad para reconocer la situación y aplicar medidas coherentes, y sigue insistiendo en su verborrea de “beneficios sociales”, sin enterarse de que cuando haya arruinado a los ciudadanos y nos hayamos quedado sin empleo los millones que van a hacerlo en el próximo año, no habrá “beneficios sociales” para nadie.

    Ya quisieran los setecientos mil parados que su incapacidad ha generado en el curso del presente año que se les hubiera “congelado el salario”, y sin embargo cuando se reúne con los interlocutores sociales (patronal y sindicatos), nunca le oigo hablar de la necesidad de contener los salarios, aunque fuese solamente de los funcionarios, que son los únicos trabajadores en España que tienen el salario garantizado… de momento.

    No tengo nada contra ellos, pero lo que sí tengo muy claro es que esa garantía del puesto de trabajo debería de ir acompañada, como un signo de solidaridad con el resto de los españoles, de la predisposición a renunciar a esos incrementos salariales, en función de salir del socavón cuanto antes y del mejor modo posible.

    A riesgo de parecer derrotista, auguro hoy, 22 de septiembre, que cuando salgan las estadísticas del empleo a final de este mes, los parados en España se habrán incrementado en más de un cuarto de millón, sólo en este mes, y nuestro “D. Tancredo”, seguirá impertérrito y cínico como sólo él sabe serlo, desviando la atención hacia otros problemas que no lo son. El trabajador que quede sin trabajo… le importa un pimiento.

    El bono español, que ha sido el balón de oxígeno para la entrada de capitales extranjeros en nuestro sistema financiero, día a día, pierde la confianza de los inversores extranjeros, que ya no se sienten seguros aquí, y la situación general se deteriora a pasos agigantados, y eso significa que para captar capitales foráneos tenemos que retribuirlos mucho mejor que lo hacen el resto de países de nuestro entorno inmediato.

    Es decir aumentamos el costo de los bonos, por la perdida de confianza.

    ¿Quién habla de eso?

    Los cimientos de nuestro sistema financiero se resienten, y es frecuente en los medios autorizados oír hablar de lo delicado de la situación para muchas entidades financieras, pero ¿han tenido Vds. noticia de alguna medida para paliar esas contingencias?

    En fin, que tenían toda la razón del mundo Rajoy y Pizarro, cuando nos previnieron de lo que estaba por llegar, y a pesar de ello, para los zapateristas (me cuidare mucho de llamarles socialistas, porque de estos los hay honrados) la culpa fue de los mensajeros, no de quienes no quisieron enterarse del mensaje.

    Y mientras tanto, siguen aposentados en un sillón, que sólo les sirve para satisfacer su vanidad política personal, y no para administrar adecuadamente, que es para lo que se supone que se les votó.

    Elperiodic.com ofereix aquest espai perquè els columnistes puguen exercir eficaçment el seu dret a la llibertat d'expressió. En ell es publicaran articles, opinions o crítiques dels quals són responsables els mateixos autors en tant dirigeixen la seua pròpia línia editorial. Des d'Elperiodic.com no podem garantir la veracitat de la informació proporcionada pels autors i no ens fem responsables de les possibles conseqüències derivades de la seua publicació, sent exclusivament responsabilitat dels propis columnistes.
    comentaris 11 comentaris
    uno
    uno
    01/10/2008 11:10
    ...

    No soy yo precisamente el que ha de volver al colegio, usted bien sabe q lo ha comparado, que sabe que ha hecho una barbaridad y ahora lo quiere arregla no es mi problema. Persona mas prepotente que usted pocas la verdad, quien es usted para mandarme al colegio jajaja increible el sabelotodo. Porfavor publicarme esto que ya van unos cuantos sin publicar, q parece q estemos en la epoca franquista.

    Pujar