elperiodic.com
SELECCIONA IDIOMA
Castellano
Per Miguel Bataller
Columna de Michel - RSS

Dos ejemplares únicos

    Llevo casi sesenta años asistiendo a misa los domingos, y he tenido que conocer en Burriana, en los poblados marítimos, a D. Antonio Losas Latorre cura párroco de los mismos, para encontrar al primer sacerdote que en las misas, tiene el detalle de pedir por “los empresarios, por los pequeños comerciantes, por los profesionales liberales, por nuestros marineros y labradores, por todos los que se esfuerzan en crear y mantener nuevos puestos de trabajo, para que en ningún hogar falte el pan, el trabajo y la gracia de Dios”.

    La primera vez que le escuché esta oración, copiada literalmente de sus palabras, fue hace unos 3 años aproximadamente, y me quedé tan encantado como sorprendido, de ver que por fin encontraba a un religioso, que se había dado cuenta de que para que la gente tenga trabajo, son imprescindibles los empresarios o profesionales liberales que se lo proporcionen.

    Y precisamente por eso, al reflexionar me decepcionó no haber oído antes a nadie en mi vida, pedir por ellos.

    Desde entonces, cuando en verano suelo asistir a misa en la Malvarrosa, siempre me siento especialmente reconfortado, cuando le oigo pedir a Dios con la misma fe por toda esa “sociedad no oficial” de esta España en la que vivimos.

    Creo que no hay mayor muestra de sensatez y solidaridad, que pedir por un mundo normal, en el que podamos convivir todos juntos, cumpliendo cada cual la función social para la que se ve dotado.

    Aquellos que se ven preparados para emprender un riesgo empresarial, y lo suficientemente dotados de ilusión y medios para llevarlo a cabo, hay que agradecerles esas ganas de arriesgar su patrimonio, su tiempo y sus conocimientos en busca de unos objetivos dignos, que a su vez le permitirán contratar a la fuerza laboral para llevarlos a buen fin y obtener unos rendimientos adecuados.

    Tan empresa son los unos, como los otros, ya que no existiría ese proyecto, si fallaran una de las dos patas en que se apoya, es decir si no hubiera un empresario dispuesto a arriesgar o una fuerza laboral dispuesta a secundarle en su proyecto.

    En mi condición de asalariado y pequeño empresario, he vivido los dos mundos con la misma ilusión, y con las mismas ganas de triunfar, ya que mi grado de autosatisfacción quedaba tan cubierto cuando emprendía algo por mi mismo, como cuando era parte del proyecto de otros.

    Lo importante era y es, poner toda la ilusión y ganas de trabajar al servicio de la idea, tanto si era propia, como si la había asimilado como tal.

    No comprendo las razones del enfrentamiento sistemático que vengo observando en los últimos cuarenta años, entre la Patronal y los Sindicatos, cuando “no son nada los unos sin los otros”.

    He vivido experiencias lamentables de “huelgas politizadas” al servicio de unas ideas, y nunca de unos trabajadores.

    En los cursos de formación gerencial que tuve el gusto de vivir a mediados de los años setenta, impartidos por un grupo excepcional dirigido por D. Antonio Ivars, me insistieron en que tan necesario era el empresario, como el trabajador responsable, “para llevar a buen puerto la nave empresarial” y en base a ello aconsejaban y en cierto modo imponían a las empresas a las que asesoraban la teoría de los tres tercios en el reparto de beneficios:

    A) Un tercio para retribuir al Empresario, por el riesgo que había asumido.
    B) Otro tercio para repartirlo entre los trabajadores que habían permitido obtener esos beneficios con su esfuerzo responsable y trabajo.
    C) Y el tercer tercio, para reinvertir y seguir creando riqueza en el seno de la misma empresa, con nuevos proyectos y la consiguiente creación de puestos de trabajo.

    Puedo asegurarles que con esos preceptos tan elementales, Peris Andreu S.A. (la empresa en la que me formé)., pasó de ser una pequeña empresa familiar con apenas una veintena de empleados a principios de los sesenta, a ser una estructura empresarial con 5 centros de fabricación en España y dos divisiones internacionales en USA y FRANCIA para la comercialización de los productos, y una base de unos 1200 trabajadores que la convirtieron en la segunda empresa de trasformados metálicos de la Comunidad Valenciana , sólo después de la Ford, y en el primer fabricante de artículos de iluminación del mundo.

    Y todo eso, se fue al garete en unos 25 años, con a llegada de los Sindicatos, y el imperio de la envidia y la politización empresarial.

    Por eso, oír ahora a un sacerdote pidiendo por los empresarios, y por quienes “se esfuerzan en crear y mantener puestos de trabajo” me suena a música celestial, aunque mucho me temo que hemos llegado tarde.

    Han sido infinitamente mas hábiles nuestros políticos de izquierdas y sindicalistas, destruyendo todo el entramado industrial y laboral, desprestigiando la figura del empresario y poniendo como ejemplos, a quienes no eran más que tristes excepciones que confirmaban la regla, y así hemos llegado al punto en que nos encontramos, con casi 6 millones de parados bien contados, y en el colmo de la indignidad, tenemos que escuchar la última “Rubalcabronada”, diciendo absolutamente convencido a nuestro VicePresidente del Gobierno, que “SABE LO QUE TIENE QUE HACER PARA CREAR PUESTOS DE TRABAJO”.

    Alfredo (así quiere que le llamen) ¿a quien pretende engañar?

    Si siendo Vd. la mano derecha y Vicepresidente del Gobierno de ZP, nos ha llevado al punto en que estamos, ¿cómo se atreve a decir eso?

    O es el mayor de los “pinochos” por el tamaño de las mentiras con que nos obsequia, o en el supuesto improbable de que sea verdad lo que dice es “el mayor de los inmorales”, por no haber puesto al servicio de su Gobierno, esos conocimientos de los que ahora dice disponer, para evitar la ruina nacional que estamos sufriendo.

    Ahí tienen Vds. a dos ejemplares únicos, en la sociedad en la que vivimos.

    Uno POSITIVO.

    Un sencillo sacerdote de pueblo, que esta impregnado de un sentido social innegable.

    Otro NEGATIVO

    Un político indigno, que por acción u omisión ha sido cómplice necesario de la mala administración que nos ha hundido, cuando según nos dice ahora dispone de los conocimientos necesarios, para crear puestos de trabajo, sin haberlos puesto en práctica durante su acción de Gobierno.

    ¡Que le vote quien no le conozca!

     

    Elperiodic.com ofereix aquest espai perquè els columnistes puguen exercir eficaçment el seu dret a la llibertat d'expressió. En ell es publicaran articles, opinions o crítiques dels quals són responsables els mateixos autors en tant dirigeixen la seua pròpia línia editorial. Des d'Elperiodic.com no podem garantir la veracitat de la informació proporcionada pels autors i no ens fem responsables de les possibles conseqüències derivades de la seua publicació, sent exclusivament responsabilitat dels propis columnistes.
    comentaris 21 comentaris
    Amadeus Mozart
    Amadeus Mozart
    16/07/2011 07:07
    Cristiano no. Acrata sí. Si posible fuese en esta sociedad

    Para usted vale el mismo comentario aanterior hecho a Bethoven. Sin embargo lo de panfletario, pues usted verá. Califiquese usted y califique tambien, de paso a D. Miguel, si quiere, claro. Lo de burdo,pues eso. un calificativo en el que habría mucho que discutir. Supongo que para usted, sólo un insulto. Y finalmente ni quiero la aristo-cracia civilizada si es cristiana. ¿O hemos de ser todo el mundo cristianos porque Planelles, Bataller y muchos más lo quieran? Eso no es precisamente tolerancia .Cabe un mundo plural en todo. Y por eso he luchado y lo seguiré haciendo mientras haya personas como ustedes que se empeñan en que no acabe la lucha de clases. Mi sueño sería una sociedad ácrata, pero eso, eso si que nunca será colectivamente posible.¡¡ Lástima¡¡

    Pujar