Cuento chino, de un fabulista ridículo

La noticia en todos los medios del 13 de Abril eran los 9.000 millones de euros que llegaban de China, y la brillante gestión de nuestro hábil Presidente “en funciones”, para atraer esa ingente suma de dinero.

Con la premura del tiempo, acabo ver y oír en esta noche de jueves, que la Agencia Reuter (infinitamente mas creíble que nuestro ilustre personaje) acaba de desmentir la noticia que ayer nos comunicó a bombo y platillo el Sr. Zapatero, de que los Fondos de Inversiones Chinos iban a invertir 9.000 millones de euros en reflotar las Cajas de Ahorros españolas, y con ellas nuestro sistema financiero.

Los gobernantes chinos que se entrevistaron con ZP, lo han desmentido rotundamente, y ahora las mismas fuentes gubernamentales reconocen que no se hablo de cifras, sino de un eventual interés de los chinos, sin entrar en detalles.

No sé si alegrarme o entristecerme del desmentido.

Ayer pensé ante esta noticia, que si los chinos invertían ese capital, y con su inversión pasaban a controlar aproximadamente el 32 % del sistema financiero español, ese increíble entramado capital-comunista que es el Gobierno Chino (si como parecía, era el Fondo Estatal el que hacía la inversión) iba a ser quien iba a decidir de una u otra forma el destino de los ahorros de todos los españoles.

La idea no me resultaba en absoluto atractiva.

Tan sólo el País entre la prensa escrita, mucho más cauto o mejor conocedor de la psicología de Zapatero y de su capacidad de engaño, ponía en solfa la noticia, y la mencionaba como una “afirmación del Presidente sin más”

Esta noche de jueves, los medios audiovisuales que he sintonizado, echaban chispas con toda la razón del mundo, por la torpeza y estupidez de nuestro Presidente.

Parece que se llega a creer sus propias mentiras, en su esquizofrénico deseo de convertirlas en realidades, y no tiene ni la suficiente prudencia, ni el más mínimo recato ni sentido del ridículo.

¿Cómo puede atreverse a lanzar esa cortina de humo siendo mentira?

¿Es tan absurdamente imbécil, como para no saber que las Agencias de noticias extranjeras (que ni se fían de él, ni escriben a su dictado) iban a indagar la veracidad de su afirmación y dejarle en el mayor de los ridículos?

Cada día que pasa, estoy mas convencido de la increíble incapacidad de este señor, para llevar los destinos de una nación como la nuestra, y me pregunto a que estadio de idiotez habremos llegado los españoles, para permitir que un individuo como él, no solo nos haya arruinado, sino nos deje en ridículo en todos y cada uno de sus actos, tanto dentro como fuera de las fronteras.

Hoy mismo, y no sé si en razón a este despropósito, el Fondo Monetario Internacional en su informe económico “ve a las Cajas de Ahorros vulnerables”, y el Informe de Estabilidad Financiera del FMI, continúa explicando que “todavía existe el riesgo de que si se produjeran más noticias negativas, un número mayor de instituciones puedan tener dificultades para refinanciarse y cubrir sus necesidades”.

¿Saben eso lo que quiere decir?

Sencillamente que con su ineptitud, el Sr. Zapatero en el supuesto de que los “chinos piquen en su anzuelo”, por el mismo dinero compraran muchas más acciones de esas entidades, o por mucho menos dinero, la participación que querían comprar.

Como su sentido de la economía y del comercio internacional no da para tanto, a este indigente intelectual nadie le ha explicado, que no se deben de publicitar los resultados de una gestión comercial o financiera, hasta que no se firman todos los documentos que la amparan, y mucho menos vanagloriarse de lo acertado de su gestión, porque si se hace, el comprador automáticamente conoce la necesidad de vender del vendedor, y en ese caso el precio de venta queda sensiblemente perjudicado.

Querer explicarle esto tan elemental al Sr. Zapatero, y que lo comprenda, escapa a sus luces, y le resulta tan difícil como aprender alguno de los idiomas que nunca ha podido aprender.

Tenemos que resignarnos, pero al menos el PSOE pensando en España, debería de retirarle de la circulación, pues ha quedado patentemente demostrado, que no sirve ya ni como “Presidente Florero”, y a la menor ocasión que tiene “mete la pata, hasta el fondo”, por ignorancia, por torpeza, por imprudencia o por egolatría, y todas esas “virtudes” las atesora en grado superlativo, nuestro triste personaje.