Cataluña: ¿y ahora que pasará?

Esa es la gran pregunta que nos preocupa ahora mismo a los españoles, a punto de llegar a la medianoche del jueves del 21 de diciembre del año 2017.

Lamentablemente el independentismo ha ganado en escaños las elecciones autonómicas, pese a haberlas perdido en votos.

Los resultados confirman a CIUDADANOS, como la primera fuerza política catalana, tanto en escaños (37) como en número de votos (mas de 1,1 millones de votos) pero el hundimiento del PPC (solo 3 escaños) y el pobre resultado del PSC (con 17) convierten esa victoria en intrascendente a la hora de poder formar un Gobierno constitucionalista en Cataluña, al no alcanzar los 68 sillones imprescindibles para poder articular un Gobierno en la Comunidad Autónoma Catalana.

En principio el sueño de mínimos, tanto de los socialistas catalanes como de los populistas de Podemos para ser imprescindibles y poder conformar un Gobierno estable en Cataluña se esfuma y con él la posible relevancia o peso específico de Iceta y Doménech. Los dos han salido de esta aventura con el "rabo entre piernas" como le ha ocurrido a García Albiol, que ha sido el mayor perjudicado, pero no él único de la aplicación imprescindible del articulo 155, para preservar la Constitución Española.

Pasa a tener el comodín de la gobernabilidad catalana la CUP, después de un fracaso similar al del PP, al quedar reducidos a solo cuatro escaños, con menos de la mitad de votos que obtuvieron en las precedentes elecciones autonómicas catalanas.

El gran debate que se presenta ahora, es que los antisistema, insisten en su decisión de declarar unilateralmente la República Catalana y tanto el fugitivo Puigdemont como el encarcelado Junqueras, son actualmente carne de presidio precisamente por esa razón.

El ex Presidente catalán sabe que tan pronto ponga un pié en suelo español, será detenido y encarcelado por haber escapado de la Justicia Española y le espera una condena por rebelión, sedición y malversación de fondos públicos de bastantes años entre rejas además de la de ser prófugo de la justicia.

Por los mismos cargos excepto el de ser prófugo, será también condenado el Vicepresidente, aunque presumiblemente a menos tiempo de privación de libertad.

Se presenta una situación tan peculiar como confusa para poder conformar ese Gobierno y elegir a su Presidente, sobre todo habida cuenta de la confrontación personal entre Puigdemont y Junqueras durante la campaña electoral, acusándose mutuamente de todo lo imaginable.

Pero aún en el improbable caso de recurrir al "pelillos a la mar" entre estos dos personajillos (para mi nunca tuvieron la categoría de personajes) les faltan un mínimo de dos votos que presumiblemente deberían de recibir de las CUP, pero no tengo muy claro que estos señores renuncien a la Declaración Unilateral de Independencia, con lo cual volveríamos a la misma situación delictiva de la que procedemos, sin haber avanzado nada y de nuevo con la espada de Damocles del articulo 155 sobre sus cabezas.

Como anticipaba yo en mi columna del 18 de Noviembre del 2017 "FUTUROLOGÍA A CORTO, MEDIO Y LARGO PLAZO" hace poco mas de un mes "poco o nada ha cambiado" con los resultados salidos de las urnas, salvo los hundimientos de unos partidos y el triunfo inesperado por lo importante de CIUDADANOS, pero a efectos de la formación de un Gobierno estable en Cataluña, la situación no sólo no se ha solucionado sino que se ha complicado mucho mas.

Preveo una lucha política encarnizada entre aquellos que propugnen por la aplicación de la legalidad vigente en España de manos del PODER JUDICIAL, sin dejarse mediatizar por el PODER EJECUTIVO, lo cual podría llevar a investir como Presidente de la Autonomía Catalana a un señor incurso en un proceso Judicial que iba a acabar antes o después con una condena mas o menos severa y su destitución correspondiente y quienes como ya anticipó Iceta (y no desmintió Pedro Sánchez que yo sepa) presionarán a Rajoy para que indulte a los golpistas inmediatamente después de ser condenados, a fin de sigan ejerciendo la Presidencia y Vicepresidencia del Gobierno Catalán si continúan ostentando esos cargos.

¿ES PREFERIBLE UNA OPCION O LA OTRA?

¿O quizás después de tantas decisiones equivocadas, como la convocatoria de estas elecciones en tan corto espacio de tiempo, ha llegado el momento de que Rajoy dimita y convoque nuevas elecciones generales al mismo tiempo que asume sus responsabilidades ahora, dejando el problema resuelto de la forma que él estime mas conveniente, a si mismo o a otros?

No sé lo que nuestro Presidente va a decidir, porque como buen gallego, cuando le veo en una escalera nunca acierto a saber si está subiendo o bajando, pero si tengo claro lo que yo haría en su lugar, pensando más en España que en mi futuro político personal.

Yo tomaría la decisión que considerase más adecuada y después convocaría unas elecciones generales, para saber de una forma fehaciente, si los españoles depositaban de nuevo su confianza en mí o tenían otras preferencias para llevar las riendas del Gobierno Español hacia el futuro.

Hasta ahora, tenía dudas de que hubieran otras fuerzas de Centro Derecha como alternativa al PP, pero con la consolidación de CIUDADANOS y la aparición en escena de VOX en defensa de la unidad de España, mis dudas se disipan y considero llegado el momento de que seamos los españoles los que elijamos lo que consideremos mejor para nuestro futuro inmediato, ya que la derecha y el centro-derecha español ya tendrían quienes pudieran defender las mismas ideas que hasta ahora ha defendido el PP, pero estando exentos de los lamentables casos de corrupción que han acabado corroyendo las entrañas de este partido que hasta ahora ha sido imprescindible, pero que cada día que pasa deja de serlo un poco más.

Del mismo modo que en la extrema izquierda y centro izquierda hay varias fuerzas políticas ofreciendo sus alternativas creo que ha llegado el momento de recorrer el mismo camino por el lado derecho a fin de poder ofrecer distintas alternativas válidas, antes de que llegue la descomposición total de las estructuras del Estado, por querer mantener una posición pétrea e insostenible en la derecha, encabezada siempre por Rajoy.

No me gustaría ver al PP convertido en una CiU española, transformista y corrupta, cambiando de nombre e ideología en cada proceso electoral.

Hay que saber decidir sin que le tiemble el pulso a Rajoy, afrontar con sensatez las responsabilidades de sus tomas de decisiones y llegado el momento, saber dejar pasar a otras personas mas jóvenes y actualizadas del mismo PP o de fuerzas políticas afines, para seguir juntos en la consecución de objetivos comunes.

Si no se sacrifica él personalmente, le obligaran los votantes como han obligado a Javier García Albiol impulsado por las decisiones de Rajoy.