El futuro del Cabanyal
Espero que ésta sea la primera de muchas columnas que escriba para elperiodic.com. Los temas de muchas de ellas surgirán sin apenas pensar, en esta ocasión sinceramente arrancar me ha costado un poco, ya que surgían tantos temas que no sabía por donde empezar y para comenzar bien la primera máxima es la de no aburrir.
El punto de partida será el lugar donde vivo, un lugar que por desgracia no resulta indiferente a nadie. Vivo desde hace unos años en el barrio del Cabanyal/Canyamelar, y lo hago por decisión propia, casi en contra de la propia inercia de la ciudad que lleva expulsando población de los Poblados Marítimos desde hace más de una década. Vivo allí casi como un acto de contrariedad frente al autoritarismo de la alcaldesa de Valencia. Un autoritarismo basado en la falsedad que supone la mayoría absoluta en el pleno del Ayuntamiento, como si las mayorías absolutas fueran un cheque en blanco para gobernar haciendo lo que les diera la gana. Sin embargo, esa misma idea no la tenía en mente Rita Barberá y su partido cuando insultaban al entonces Presidente del gobierno José Luis Rodríguez Zapatero o en la campaña del agua para todos y la locura del trasvase del Ebro o cuando el PP se manifestaba junto a la cúpula de la iglesia contra el matrimonio homosexual.
La idea de la mayoría absoluta la usa Rita Barberá porque es la única coartada a la que puede recurrir, de las legales ya se encargó una orden ministerial del gobierno de España en la pasada legislatura y las morales, que nunca las tuvo, siempre han estado y están en posesión de los/as vecinos/as del Barrio. Y por ello, y permítanme la repetición, a la Alcaldesa solo le queda la "macabra" idea de la mayoría absoluta que el tiempo y los hechos están dejando en una simple excusa.
El Cabanyal tiene solución y es muy sencilla, pero simplemente no es la que quiere una sola persona, por eso no se lleva a cabo.
La solución de la rehabilitación es la mejor en términos patrimoniales, sociales y arquitectónicos (recorran Europa buscando barrios marineros) y además la más económica. La rehabilitación es en definitiva la única solución que tiene el Cabanyal y para que esto sea una realidad una persona y un partido deben dejar el gobierno de la ciudad... y eso si que está en la mano de toda la ciudadanía de Valencia.