Unos están, otros vienen y van
Lo observo por Segorbe (9 concejales PP, 3 PSOE, 1 Partido Republicano) donde el candidato popular Rafael Calvo está permanentemente, y los otros tres de la izquierda, por no residir en nuestra ciudad, vienen y al ratito se van.
Así, los “alcaldables” de Izquierda Unida, y el Partido Republicano ambos viven en Valencia, y el socialista lo hace en Castellón, preciosas ciudades ambas, pero nada indicadas para teledirigir una emergente ciudad como Segorbe. Por eso, los dos primeros aspiran a lograr el mismo concejal de la izquierda dura y el segundo a no perder alguno de los tres que ahora tiene.
Ocurre igual, en muchos, de los cincuenta municipios del Palancia y del Mijares, la izquierda ha abandonado buena parte del territorio y va camino de convertirse en un partido de salón, donde solo el veraneante progreesta disponible para rellenar las candidaturas del puño y la rosa pues los del terreno ya han sido engañados en demasiadas ocasiones.
Por eso en estas tierras de habla castellana, unos estamos y a los socialistas los vemos venir y marcharse al final del mitin.
En el Palancia y el Mijares, y sus tres partido judiciales, Lucena, Viver y Segorbe, liderados por los diputados Luís Rubio, Laureano Sandalinas, y Manuel Martín, los vecinos de Vallat, Toga, Villamalur, Villanueva de Viver, Pina de Montalgrao, Matet, Arañuel, Barracas, Sacañet, Gaibiel, Pavías, El Toro o Chóvar y algunos más, han visto como los del PSPV iban y venían y sin presentar candidaturas completas con vecinos. Todos ellos tendrán alcaldía popular por la deserción socialista, flaco favor a la concurrencia democrática.
En esta zona hemos pasado de ser el mejor partido, a ser el único en muchos municipios lo cual no es motivo de gozo pero conviene señalarlo y es la lógica conclusión de un proceso en el cual, al principio, la mayoría de estos ayuntamientos estaban gobernados por el PSOE, y la suma de la mala gestión y el abandono de sus dirigentes provinciales y regionales, propició el desplome electoral primero y la desafección total después.
Y mucho me da que en el futuro la provincia de Castellón acentuará esta tendencia, servir a los municipios no es dirigir un departamento de la UJI -Universidad Jaime I, hay menos moqueta, la atención es veinticuatro horas y no cierran sábados ni domingos. No es mejor, ni peor, ambas, la docente y la política, son tareas indispensables pero dentro del PSOE los unos han barrido completamente a los otros, y ya lo están pagando con 30 candidaturas menos que el Partido Popular.
En el equilibrio está la virtud, pero las luchas palaciegas de los socialistas les han impedido alcanzarlo y hoy el socialismo en estas comarcas es un socialismo de salón, más propio de los casinos del XlX que de la actualidad, donde los vecinos no se conforman con que vayas y vengas, quieren que estés, es lo justo.
¿Y esto lo dice alguien del partido que empadrona a vecinos de otros pueblos e incluso a inmigrantes en su propia casa o casas derruidas para salir elegido?