De reptiles
Tenían tan interiorizado que lo que hacían con el dinero de todos era propio de reptantes, de aquellos animales que caminan arrastrándose, que el mismo director general de Trabajo de 1999 a 2008, el socialista Francisco Javier Guerrero, confesó que se concedían multimillonarias ayudas sin regulación y que «no era una subvención excepcional, era un fondo de reptiles para crisis». Así directamente, sin anestesia, confesión ante la policía.
En el diccionario de la Real Academia de la Lengua “fondo de reptiles” se describe como “fondos secretos que se aplican a la captación de voluntades”, mientras todos pensábamos que eran aquellos fondos opacos con los que se enriqueció la cúpula de Interior de Felipe González, y que llevó a la cárcel a Rafael Vera por apropiarse de más cuatro millones de euros, o también aquellas pesetillas con las que el ministro Corcuera regalaba joyas a las esposas de sus colaboradores, resulta que no, que los reptantes socialistas estaban también haciendo su agosto con el dinero de la política social.
Es reprochable que en materia de pensiones el mismo gobierno que le dice a un albañil que deberá subir al andamio hasta los 67 años, favorezca la jubilación anticipada a partir de los 55 años a los empleados de bancos y cajas, pero es sencillamente repugnante que se regalen pensiones a amigos que no han trabajado y todavía no haya ningún responsable político en su casa o en prisión.
El gobierno de Rodríguez Zapatero ha desmontado el armazón legal de España, que era un país serio, no solo abriendo el melón estatutario a nuevas naciones inconstitucionales, sino derogando normas tan necesarias como la que impedía a las administraciones endeudarse irresponsablemente o la que garantizaba a nuestros jubilados la actualización de sus merecidas pensiones.
Que toda esta desmembración normativa se haya hecho en los mismos años en los que el “fondo de reptiles”, encargado de inventar prejubilados, alcanzaba los 410 millones de euros, el déficit del Sistema Nacional de Salud arriba a los 15.000 millones, y el gobierno central debe a los autónomos más de 7.500 millones de euros, nos descubre, con toda la crudeza, el nivel de ineptitud alcanzada por el actual ejecutivo, propio de reptiles, según ellos.
España se rompe (si es que quedaba algo sin romper). ¿Es que sólo se pueden hacer las cosas a su manera? ¿Así respeta a los ciudadanos? ¿Qué propone? Es otro artículo de "¡Que viene el lobo!". Otro artículo del miedo. Otro artículo en el que sólo aporta sus frustraciones en vez de valorar que su partido se salta sus estaturos y nombra a un imputado como candidato a la presidencia de la Generalitat Valenciana. ¿Le importaría concretar lo que quiere decir y valorar la situación actual?