Las playas que dejaron de serlo

Siempre que hablo de mi ciudad lo hago con cariño y orgullo. Ese vínculo que me une a Burriana es el de mi infancia, el de mi colegio e instituto, el de los veranos infinitos corriendo en bici, saltando acequias y, por supuesto, disfrutando de la playa. El Grao, la Serratella, el Arenal, Malvarrosa... todas son indiscutiblemente bellas y en todas hemos disfrutado del baño, de correr por la orilla, de jugar a tirar piedras o de montar castillos...

Quizás hoy, quienes nos gobiernan, nunca tuvieron ese vínculo con nuestra costa. Quizás ni siquiera se plantearon que lo que para nosotros, como vecinos de Burriana, eran playas, para ellos lo fueran.

Y es así como este verano los vecinos que hemos compartido horas y horas a las orillas de playas tan singulares como el Grao o la Serratella nos hemos encontrado con un abandono total por parte de las autoridades que debían velar por su mantenimiento.

En Burriana, en opinión del concejal de Playas, representante de Compromís, playa solo hay una y es El Arenal. Nosotros, humildemente, creemos que se equivoca. Playas hay más. Quizás no lo sean para él o quizás no tengan el tirón turístico que espera, pero no por ello han dejado de existir.

Así se lo transmitimos al tripartito en pleno, vista la dejación de las playas del Grao y la Serratella. Ambas, gracias a la ingeniería de Costas, han ganado terreno al mar dotando a los residentes de espacios para el baño donde antes no existían accesos. Ambas son, en nuestra opinión, un espacio más de recreo y esparcimiento. Por ello planteamos al tripartito que si Costas no ejecutaba las tareas de mantenimiento oportunas para poner en valor la costa, lo hiciéramos desde el consistorio. Porque somos muchos los vecinos de Burriana que creemos que la belleza del bullicio Arenal no sería tal sin la tranquilidad y paz que se respira en el Grao y la Serratella.

Y es por ello que reclamamos una inversión por parte del consistorio que mejorara las condiciones de ambos frentes marítimos de cara a la temporada estival. En opinión de quien escribe Burriana es bella en conjunto y su patrimonio y riqueza lo es por la suma de todos sus exponentes. Ignorar la existencia de ambas playas es propio de quien no conoce nuestra identidad o de quien ignora nuestra costa.

Lamentablemente, nuestras demandas han caído en saco roto ante un tripartito que ni está ni se le espera. Una debilidad que se traduce en abandono y cuya muestra más evidente se constata en las calles, donde la limpieza brilla por su ausencia.

Porque ahora Compromís anda ahora enfrascado en la redacción del Plan Estratégico de Turismo, el que supuestamente ha de poner en valor las fortalezas de nuestra costa, esas que, sin embargo, ignora parcialmente. El PSPV está entregado a otros menesteres, puesto que Servicios Públicos pasa poco o más bien nada por el distrito marítimo, donde los excrementos de los perros se acumulan desde hace semanas. Y en Podemos han echado el cierre por vacaciones de agosto, que para eso es el mes de descanso por antonomasia.

Juzguen ustedes mismos. Yo me quedo con mis recuerdos de infancia.