Tensión por el ultimátum de Vox que amenaza con romper los gobiernos autonómicos

Tensión política en toda España por el ultimátum que lanzó el líder de Vox, Santiago Abascal, este miércoles por la noche, al amenazar al Partido Popular con romper los gobiernos autonómicos si no se rechaza la acogida de migrantes menores no acompañados (en su acrónimo, Mena) para aligerar la presión sobre el archipiélago Canario.

La decisión de la cúpula popular de aceptar la acogida de 400 menores en función de las capacidades de sus comunidades autónomas no ha sentado bien a los de Vox, que quieren oponerse a ello frontalmente, lo que pondría en juego la continuidad de los gobiernos autonómicos gestionados por ambos partidos, como es el caso de la Comunitat Valenciana.

Por ello, Abascal amenaza con romper los gobiernos autonómicos que acepten la propuesta del Partido Popular nacional y ha convocado para este jueves una convocatoria urgente y extraordinaria del Comité Ejecutivo Nacional para acordar los próximos pasos.

Ante este riesgo, el president Mazón ha asegurado que el gobierno valenciano es “fuerte” y que la rotura del pacto "sería una gran sorpresa y no la entendería". “No veo ningún peligro al pacto”, ha expresado esta semana ante el ultimátum de Abascal.

Además, sobre la cuestión de la migración, ha lamentado que el Gobierno de España actúa “sin preaviso, sin antelación y sin recursos” y ha incidido en que las regiones “tienen matrícula de honor en solidaridad”. Así, ha hecho referencia a que la Comunitat Valenciana está desbordada ya que dispone de 317 plazas en centros de acogida para migrantes menores y tiene 481, lo que supone una capacidad del 170%.

Sin embargo, por su parte, el síndic de Vox, José María Llanos, ha presionado afirmando que "lo que opina Vox es lo que dice Abascal, que ha sido muy claro. Los gobiernos autonómicos que acojan menas serán gobiernos rotos. Lo que diga Abascal es lo que va a hacer Vox".