La supervivencia de todo un sector en juego: el caso del pequeño comercio
Los mensajes reclamando medidas urgentes no cesan, todo para garantizar su supervivencia
La supervivencia de todo un sector está en juego. El pequeño comercio de la Comunitat Valenciana atraviesa horas críticas pese a los grandes esfuerzos realizados durante el confinamiento, cuando se convirtieron en una alternativa segura para muchos ciudadanos.
Se calcula que alrededor del 20% de los pequeños establecimientos tendrán que cerrar tras esta crisis, unas cifras que respaldan las numerosas peticiones que se están realizando desde Confecomerç para que se adopten medidas de carácter urgente en materia de apoyo fiscal y financiero.
Entre ellas, por ejemplo, aplazamientos y exoneraciones de impuestos, bonificaciones fiscales, agilidad en la tramitación de ayudas y subvenciones dirigidas al pequeño comercio, liberalización de partidas presupuestarias destinadas a obras/servicios que no se hayan ejecutado o no se vayan a poder ejecutar, garantizar la no subida de impuestos.
“La pandemia ha dado visibilidad al trabajo esencial que desempeña el pequeño comercio” y también “ha permitido reflexionar sobre qué habría sido de los ciudadanos sin la existencia de un comercio de proximidad, que ha estado en primera línea, abasteciendo a toda la población de productos, básicos y necesarios, teniendo una enorme trascendencia por su contribución social, además de la económica y laboral” ha defendido el presidente de Confecomerç en su intervención en las Cortes Valencianas.
Lo ha hecho además, postulando al pequeño comercio como “sector estratégico y por tanto un interlocutor, necesario e imprescindible, en la Comisión de Reconstrucción de les Corts, cuyo objeto es paliar los efectos provocados por la Covid-19”.
Asimismo, Torres ha destacado la necesidad de poner de relieve el sector del pequeño comercio, siendo éste uno de los principales líderes, en creación y mantenimiento del empleo. En este sentido, el presidente de Confecomerç CV ha aportado datos sobre la importancia que ha tenido el comercio en la última crisis: el 23,8% de los ocupados en este este sector era por cuenta propia en 2018 (esta cifra llegó a rozar el 30% en el 2013) frente al 16% para el conjunto de la economía.
Otras medidas
En lo referente a las medidas que solicita el sector, además de las ya comentadas, se encuentran otras de carácter laboral, formativa y de gestión como son la flexibilización y continuidad de los ERTES siendo gradual la incorporación de los trabajadores en función de la actividad, digitalización del sector, favorecer el relevo generacional, facilitar el emprendedurismo.
Así como, aquellas medidas de erradicación de la competencia desleal y venta ilegal (perseguir el fraude y la economía sumergida y promover campañas de concienciación para el consumidor), medidas de incentivo comercial (campañas de promoción del consumo-planes renove, incentivar las compras en el pequeño comercio, campaña autonómica para potenciar el comercio de proximidad).
Por último, también proponen impulsar medidas legislativas fundamentalmente en materia de arrendamientos comerciales, cambio legislación de rebajas, entre otras.
Cabe recordar, que el pequeño comercio contribuye al tejido productivo de la Comunitat con más de 210.000 empleos directos, inyectando al sistema más de 4.000 millones de euros en salarios y cerca de 1.200 millones de euros en inversión, moviendo un volumen de negocio de más de 24.000 millones de euros.
