Jóvenes borrachos desatan un rescate aéreo tras un selfie o micción al borde del precipicio de un acantilado de Santa Pola
Sus dos amigos también bajaron y necesitaron ayuda mientras la grúa se llevaba su coche sin seguro
La Policía Local de Santa Pola ha informado de un insólito suceso ocurrido este fin de semana, en el que se ha tenido que movilizar un helicóptero de rescate para auxiliar a un grupo de personas que se encontraban en estado de ebriedad. El incidente, que ha puesto en riesgo la vida de varios individuos, se ha producido tras una peligrosa acción en la zona de acantilados del municipio.
Una concatenación de sucesos
Según han detallado desde el cuerpo policial, uno de los implicados se precipitó desde el borde del acantilado, en lo que describen como un intento de orinar o hacerse un selfie —las causas aún no están claras— desde una zona de alto riesgo. La caída, afortunadamente, no fue mortal, pero sí lo suficientemente aparatosa como para requerir una operación de rescate urgente.
La situación se complicó todavía más cuando dos amigos del herido decidieron bajar a buscarle por sus propios medios, en lugar de alertar a los servicios de emergencia. Ambos quedaron atrapados, sin posibilidad de subir ni de auxiliar a su compañero, lo que obligó a un rescate múltiple por tierra y aire.
Ante la dificultad de acceso al lugar y el riesgo para los equipos de intervención, se solicitó el apoyo de un helicóptero de rescate, que finalmente logró extraer a los tres implicados del acantilado. Pero la historia no terminó ahí: cuando los agentes acudieron al lugar donde se encontraba estacionado el coche del grupo, descubrieron que carecía de seguro en vigor, por lo que fue retirado por la grúa municipal.