El equipo del No Sólo Fútbol Club Sagunto visita el consistorio

La tarde de ayer, lunes 25 de septiembre, el No Sólo Fútbol Club Sagunto visitó el ayuntamiento de la ciudad con el objetivo de conocer el funcionamiento de la institución más cercana a la ciudadanía. El alcalde de Sagunto, Quico Fernández, y el concejal de Deportes, Miguel Chover, recibieron a los integrantes del club y a sus familiares en el Salón de Plenos, donde les explicaron el día a día del consistorio y, además, respondieron a las peticiones y sugerencias de los jóvenes deportistas.

Esta formación, impulsada por el entrenador Javier Alcaina, quien también asistió a la visita, y formada por jóvenes deportistas, tiene como finalidad educar a través del deporte, en este caso del fútbol. Como su nombra indica, los 75 jugadores que forman el No Sólo Fútbol Club Sagunto, no sólo entrenan "para pegarle bien a un balón", como indica Alcaina. Durante los próximos 10 meses que dura la temporada, la línea educativa del club girará en torno a tres proyectos. El primero es el de conocer las instituciones y las personas más relevantes de la localidad. Al Ayuntamiento de Sagunto le seguirá la Lira Saguntina, los Altos Hornos o el museo de la Morería. El segundo proyecto será el de dar a conocer a los integrantes del club el funcionamiento de una empresa deportiva. Bajo el lema Minuto Cero. Tercer Tiempo, el tercer proyecto irá destinado a los padres y madres de los jóvenes, para que antes de los partidos se relacionen con los padres y madres de los jugadores visitantes y que así sancionen actividades incívicas y que no haya disputas entre ellos.

Fundado en 2011, el No Sólo Fútbol Club Sagunto no disputa competiciones oficiales. Su principal objetivo es educar en valores y fomentar la interacción de las familias que lo componen. De los 18 jugadores que formaban el primer equipo hace 6 años procedentes del Colegio Villar Palasí de Sagunto, hoy lo forman 75 niños y niñas de diferentes nacionalidades, pero todos residentes en Sagunto. El fútbol es utilizado como una plataforma para que las familias de los jugadores convivan durante los 7 días de la semana favoreciendo la integración en el equipo y sus familias. El club, además, no cobra a los jugadores por participar, sino que funciona a través de subvenciones y de la venta de papeletas de rifa.