Rocafort negocia con el Consell, Godella y Burjassot, alternativas al azarbe en su huerta
El Ayuntamiento de Rocafort ha comenzado a negociar con la Conselleria de Medio Ambiente y los Ayuntamientos de Burjassot y Godella una alternativa para evitar la construcción de un azarbe para aguas pluviales en la huerta, que supondría una grave afección para el patrimonio natural de la localidad.
El alcalde en funciones, José Antonio González, y el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, Eduard Comeig, mantuvieron ayer una reunión con el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro, la alcaldesa de Godella, Eva Sanchís, el concejal de Medio Ambiente de Godella, Fernando Oliveros, así como con técnicos municipales de Burjassot, para llegar a un acuerdo que solucione el problema de las inundaciones en esta zona de l'Horta Nord mediante una intervención menos agresiva que la del actual proyecto.
Este encuentro se produce dos semanas después de que el pleno del Ayuntamiento de Rocafort aprobara una moción para instar a la Generalitat a paralizar el plan, que prevé construir un canal de más de 1 kilómetro de largo y de hasta 30 metros de ancho por mitad de la huerta de Rocafort, desde el límite entre el municipio y Godella hasta Massarrojos, en paralelo a la plataforma del ferrocarril. El pleno municipal rechazó la intervención por considerar que era demasiado agresiva con el medio ambiente y que se debía llegar a una solución de consenso entre los municipios afectados y Conselleria.
En este sentido, el encuentro de ayer confirmó el compromiso de todas las partes por alcanzar un acuerdo y considerar otras alternativas. La primera semana de octubre habrá una reunión técnica para estudiar otras posibilidades al actual proyecto. Entre ellas, la construcción de balsas de laminación en determinadas zonas de Rocafort y Godella que permitan drenar el agua de lluvia y controlen las avenidas en origen, con el fin de eviar que lleguen a la Real Acequia de Moncada.