Un hombre asalta el monasterio de Gilet y deja un fraile muerto y tres heridos
Tres religiosos del Santo Espíritu están en el hospital
Este sábado por la mañana el Monasterio Santo Espíritu de Gilet, enclavado en el bello paraje de la Sierra Calderona, ha sido asaltado por un hombre que ha dejado un fraile muerto y otros tres heridos. "Rezad por Santo Espíritu porque de una manera inconcebible ha entrado un hombre con palos y habitación por habitación ha sido golpeando casi hasta la muerte", explica uno de los religiosos.
El asalto al monasterio valenciano se ha producido a las 9.30 horas y la primera llamada al 112 ha sido a las 10 horas, según han confirmado desde el Centro de Coordinación de Urgencias (CICU) que ha recibido el aviso por el incidente para atender a los heridos.
"La comunidad de frailes se encontraba en sus respectivas habitaciones tras haber compartido el desayuno cuando el atacante comenzó a recorrer los pasillos del monasterio. En este violento acto, el agresor hirió a tres de nuestros hermanos antes de huir del lugar", han explicado desde la comunidad religiosa.
Al parecer, Fray Ángel Ramón, uno de los frailes del monasterio, fue quien logró alejar al atacante y dio aviso a los servicios de emergencia, quienes acudieron inmediatamente para atender a los heridos.
Así, un SAMU ha trasladado a un varón de 76 años por traumatismo craneoencefálico hasta el hospital Clínico, mientras que unidades SVB han trasladado a otros 3 heridos por traumatismos o contusiones hasta el hospital de Sagunto.
Se trata de 3 varones de 57, 83 y 95 años de edad, informan desde el CICU.
Según han difundido los religiosos, el padre Juan Antonio ha sido el que ha sufrido la peor parte, con el traumatismo craneoencefálico y sangrado por boca, nariz y oídos, mientras que el padre Carlos habría recibido golpes en cuatro partes de la cabeza y el padre Fernando sufriría de un ojo devastado y la cabeza con numerosos golpes, como el padre Albert, el cuarto de los heridos.
La Guardia Civil y la Policía Loccal busca ahora a este hombre, que habría matado a golpes a los monjes con el báculo de una estatua, según Àpunt.