Fallece el sacerdote jubilado valenciano Francisco Javier Puchol, que fue párroco de El Perelló durante 40 años
Misa exequial, hoy lunes, a las 16 horas, presidida por el Arzobispo en la parroquia San Pascual Bailón, de El Perelló
El sacerdote valenciano Francisco Javier Puchol Marco, que fue párroco de la pedanía suecana de El Perelló durante cuatro décadas, falleció ayer, domingo, a los 86 años de edad en su domicilio de Sueca.
La capilla ardiente ha quedado instalada precisamente en la parroquia San Pascual Bailón, de El Perelló, cuyo Ayuntamiento le había declarado “Hijo predilecto”.
Igualmente, la misma parroquia acogerá esta tarde, a las 16 horas, la misa exequial por su eterno descanso, presidida por el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares.
Natural de la localidad de Sueca, Francisco Javier Puchol recibió la ordenación sacerdotal en Valencia en 1960 y fue párroco, entre 1961 y 1964, en las pedanías de Venta de Gaeta y en Los Pedrones.
Durante cerca de 40 años, desde 1964 hasta 2003, fue párroco en San Pascual Bailón, en El Perelló, y también desde 1964 hasta la actualidad desempeñó el cargo de capellán en la Capilla de San Roque, en Las Palmeras (Sueca).
Además, fue capellán, desde 2006 hasta 2020, en la residencia de ancianos Sagrado Corazón regida por las Hermanitas de los Ancianos Desamparados en Sueca.
Fue también miembro de la comisión diocesana de Turismo y Tiempo Libre desde 1997.
Recientemente, Francisco Javier Puchol Marco, había donado al Ayuntamiento de El Perelló su archivo fotográfico compuesto por más de 2.000 imágenes, que abarcan las cuatro décadas en las que fue párroco, y en las que recogió las costumbres y actos religiosos, culturales y sociales más relevantes.
En sus cuarenta años al frente de San Pascual Bailón, Puchol promovió, entre otras iniciativas, la construcción del nuevo templo parroquial de esa población, y de las ermitas de Les Palmeretes, El Pouet y el Recatí, además de la barraca que lleva su nombre y la puesta en marcha de una banda de cornetas y tambores.
En 2010, el consistorio de El Perelló le concedió el título de “Hijo Predilecto” en reconocimiento “a su labor realizada a favor de la religión, la historia, la cultura y el bienestar de la sociedad perellonera”, según explicó entonces el propio Ayuntamiento.
Puchol Marco, que cursó los estudios de Bachiller en las Escuelas Pías de Valencia, ingresó a los 18 años en el Seminario de Moncada, donde realizó los estudios universitarios de Teología y los de Filosofía, y fue ordenado sacerdote en Sueca, en 1960, por el entonces arzobispo de Valencia, monseñor Marcelino Olaechea.