Cuatro expertos señalan que la Constitución de 1812 ha sido el “producto de exportación constitucional español más exitoso”, por encima de nuestro texto constitucional actual
La Universidad CEU Cardenal Herrera ha celebrado hoy el panel de expertos “200 años de constitucionalismo liberal”, en el marco de las actividades de la Comisión para la conmemoración del bicentenario de la Constitución de 1812 en la Comunidad Valenciana
La comisaria general, María José Ferrer, ha señalado que con este texto, que incluso se tradujo al ruso en 1813, “España sorprendió al mundo”
Esta mañana la Universidad CEU Cardenal Herrera ha acogido la celebración de uno de los actos conmemorativos el bicententario de la Constitución de 1812 organizados por la Generalitat Valenciana: el panel de expertos en Derecho Constitucional “200 años de constitucionalismo liberal”, que ha contado con la participación de la comisaria general para la conmemoración del Bicentenario en la Comunidad Valenciana, María José Ferrer.En su intervención ante los estudiantes de la Universidad CEU Cardenal Herrera, Ferrer ha destacado el interés académico valenciano por el constitucionalismo. “En 1813 Valencia fue la primera ciudad española que solicitó la creación de una cátedra de Derecho Constitucional”. Y también la importancia de la Constitución en la implantación del derecho a la enseñanza universal: “En una España en la que el 90% de la población era analfabeta, los diputados de Cádiz entendieron que no hay libertad sin instrucción e instauraron la creación de escuelas en todos los municipios para enseñar a leer, escribir y contar”.
“Producto de exportación”
El análisis de los expertos participantes en este panel se ha centrado en el carácter internacional de la Constitución de 1812. María José Ferrer ha recordado que ésta “fue la tercera constitución escrita en el mundo y solo un año después de su promulgación fue traducida al ruso”. “Con este texto, elaborado en un país del Antiguo Régimen e inmerso en una guerra contra los franceses, España sorprendió al mundo”. El catedrático de Derecho Constitucional de la CEU-UCH, Manuel Martínez Sospedra, ha coincidido en subrayar el carácter internacional de “La Pepa”: “La Constitución de 1812 es el producto de exportación constitucional español más exitoso, por encima de nuestra carta magna actual, que ha inspirado otras constituciones vigentes como las de Polonia, Guatemala o Colombia”.
Es un “hecho inédito”, según Martínez Sospedra, que una constitución española se adoptara en otros países, como en Nápoles y el Piamonte en 1820, o que fuera traducida casi literalmente en Portugal en 1824. Incluso actualmente su presencia es notable a nivel internacional: “La actual Constitución uruguaya se abre con el texto del artículo 2 de la Constitución española de 1812 y la figura del presidente de la República de Chile tiene atribuciones similares a las de la monarquía constitucional española de 1812”. En líneas generales, “nuestro diseño del reparto del poder actual es el mismo que se estableció en aquel texto”.
En el panel de expertos, moderado por el vicedecano de la Facultad de Derecho, Empresa y Ciencias Políticas de la CEU-UCH, Joaquín Marco, han participado también los profesores de esta Universidad Leyre Burguera y Emilio Callado. La profesora Burguera ha destacado el amplio cuerpo electoral contemplado en el sistema lectoral que incluye la constitución de 1812, que alcanzaba los tres millones de votantes cuando en Inglaterra solo votaban entonces 140.000 ciudadanos. Por su parte, el profesor e historiador Emilio Callado ha destacado la confluencia de la resistencia intelectual atrincherada en Cádiz y la resistencia civil y popular que luchó contra la invasión francesa, como germen de la revolución liberal burguesa plasmada en la Constitución de Cádiz.