El Ayuntamiento de Real de Gandia dedica una plaza a su párroco desde 1966 fallecido anoche
El Ayuntamiento de la localidad valenciana de Real de Gandia ha acordado dedicar una plaza al sacerdote Roberto Aznar García, que falleció anoche a los 82 años en su domicilio en esta población, de la que era párroco desde 1966, según ha indicado hoy a la agencia AVAN su alcaldesa, Vanessa Martínez.
En 2007, el mismo Ayuntamiento le declaró “Hijo adoptivo”, y en aquella sesión los partidos acordaron la propuesta de dedicarle al párroco la “primera calle o plaza que se abriera en la localidad”, como consecuencia de la expansión urbanística de la población, ha precisado.
Se da la circunstancia de que fue el pasado lunes cuando fue convocado el pleno para hoy, jueves, para ser aprobada así la dedicación de la plaza a Roberto Aznar García.
Según la alcaldesa, Roberto Aznar ha sido “nuestro cura de toda la vida, que ha estado siempre con nosotros compartiendo nuestra existencia, acompañándonos con alegría y a través del que hemos recibido todos los sacramentos”.
La alcaldesa ha recordado al párroco fallecido como “una persona muy sencilla, muy llana, accesible a todo el mundo, incluso a los no creyentes, y a la que todos se acercaban para pedirle consejo”, porque “siempre transmitía alegría, tranquilidad y serenidad frente a los problemas”.
En el año 2007, Roberto Aznar García celebró sus bodas de oro sacerdotales en el municipio, y presentó su renuncia por razones de edad, aunque continuó con su labor atendiendo a la feligresía. Con motivo del aniversario, el Ayuntamiento le rindió un homenaje y le declaró “Hijo adoptivo del municipio”.
Entre su labor, la alcaldesa ha destacado su ayuda para la creación de la Cáritas interparroquial y la restauración de las pinturas de la cúpula de la iglesia, así como varias reformas que se acometieron como la de la plaza de la Iglesia y una plaza más pequeña anexa a ésta, que será la que lleve su nombre, desde donde puede contemplarse, a través de una vidriera, las pinturas restauradas y donde se plantaron varios cipreses.
El cardenal Antonio Cañizares, arzobispo de Valencia, ha presidido esta tarde la misa exequial por su eterno descanso en la parroquia de la Visitación de Nuestra Señora, de Real de Gandía que ha sido concelebrada por el obispo emérito de Mondoñedo-Ferrol, monseñor José Gea, y numerosos sacerdotes.