Acuerdos conjuntos sobre la política hídrica en la Ribera
Cullera ha acogido este mediodía una cumbre de alcaldes y concejales de 13 poblaciones de la Ribera (Albalat de la Ribera, Algemesí, Alzira, Benicull, Carcaixent, Corbera, Cullera, Favara, Fortaleny, Llaurí, Polinyà de Xúquer, Riola y Sueca) afectados por la contaminación del agua.
El encuentro, convocado por el consistorio cullerense, ha servido para que los responsables públicos de estas localidades hayan analizado la situación del abastecimiento de agua en sus municipios y hayan acordado una serie de acciones conjuntas en defensa de los intereses de los vecinos de la comarca.
Los puntos acordados por los alcaldes y concejales presentes son los siguientes:
1º- Mantener el recurso que se presentó al Plan de Cuenca del Xúquer en octubre de 2014 por parte de los municipios de Albalat de la Ribera, Benicull, Corbera, Cullera, Favara, Fortaleny, Polinyà de Xúquer, Riola y Sueca. Asimismo, se ha invitado al resto de poblaciones afectadas a que se sumen con ayuda financiera a esta iniciativa legal.
2º- Redactar un protocolo para la constitución de un ente asociativo que defina los objetivos y el calendario de actuaciones de todos los municipios. Los principales objetivos pasan por el logro de una concesión directa de 30 hectómetros cúbicos para la Ribera de aguas superficiales del Xúquer, la puesta en marcha de una política activa de regeneración de los acuíferos y la negativa a asumir el pago de los costes de amortización de las infraestructuras de potabilización.
3º- Celebrar una reunión en Cobera con fecha 11 de septiembre (12 horas en la Casa Consistorial) para establecer un planning de actuación para conseguir la concesión directa de aguas superficiales para la comarca. Se invitará a dicho encuentro a la presidenta de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Mª Ángeles Ureña.
4º – Ejercer la presión política pertinente y mantenerse atentos a la redacción del nuevo Plan de Cuenca para observar que cumple las exigencias de los municipios ribereños en aras de obtener una concesión directa de aguas superficiales de 30 hectómetros cúbicos (en su caso, el máximo de hectómetros cúbicos que puede tratar la potabilizadora de la Garrofera).
