Éxito de público en el cine taurino gratuito al aire libre organizadas por El Barrio
Este año la semana de cine taurino se traslada de junio a septiembre y del Espai Jove al Mercado Municipal. La peña taurina El Barrio recupera este tradicional encuentro y lo hace volviendo a sus orígenes, allá por los años 60 del siglo pasado: proyecciones al aire libre, gratuitas, con una breve presentación y con títulos clásicos del género taurino español. El Litri y su sombra (el martes 20) y Aprendiendo a morir (el miércoles 21), ambas a las 10 de la noche, en la explanada tras el mercado.
El cine taurino volvió a Puçol en 2006, primero en el paseo de la Constitución, al aire libre, luego en el Sindicato Agrícola (más que nada, porque un año llovió durante las proyecciones) y de ahí los últimos años al Espai Jove, donde había mejor calidad de sonido y de proyección.
Pero al mismo tiempo se perdía algo.
Quizá la lejanía del nuevo escenario. Quizá cierta dejadez del público. Puede ser la añoranza del aire libre…
Lo cierto es que este año, en primavera, la semana de cine taurino no se celebró.
Fue en el Consejo Municipal Taurino del mes de mayo donde Alfonso Ávila, representante de la peña taurina El Barrio, planteó hacerse cargo de las proyecciones, siempre con el visto bueno del ayuntamiento y trasladando las sesiones a septiembre, entre sus dos fines de semana de festejos taurinos.
Y la propuesta fue aprobada. Primero en el consejo taurino. Luego por la peña.
Recuperar dos títulos clásicos, de sobra conocidos por el público, y también organizar una cena previa a la proyección, en la calle, improvisada, aunque con cierta organización, donde cada uno lleva su bocata pero la peña pone algo de bebida y un picoteo.
Lo preciso para iniciar una tertulia al aire libre. Con el tiempo acompañando, algo imprescindible.
Y luego la proyección, tras una breve presentación del propio Alfonso Ávila, esta vez en calidad de presidente de la peña taurina El Barrio, recordando que “fue algo impulsivo plantear que nosotros podíamos seguir manteniendo vivo el cine taurino, pero ver ahora esta pequeña plaza con tantos vecinos demuestra que podíamos hacerlo y lo hemos conseguido”.
Porque más de setenta vecinos se acercaron el martes 20 de septiembre a ver El Litri y su sombra, un título emblemático del género hispano por excelencia, aunque quizá no tanto como el clásico indiscutible que se proyecta el miércoles 21: Aprendiendo a morir, una película que hizo tanto por El Cordobés como algunas de sus mejores corridas.
Un rincón acogedor, a espaldas del mercado municipal. Buena temperatura. Agradable compañía. Dos clásicos del cine español… Y todo gratis.
La excusa perfecta para salir una noche y compartir la velada con los vecinos.
El Barrio ha dado en la diana. Una vez más.