Varios pueblos de Castellón recuperan el agua tras sufrir restricciones que han afectado a miles de vecinos
Agradecen la paciencia de los vecinos durante los días en los que se ha visto alterado el suministro
Han finalizado los trabajos para el cambio de la bomba en el pozo Llargueres 2, que abastece a Vilafranca y Benassal. La alcaldesa de Vilafranca, Silvia Colom, ha agradecido a los vecinos la serenidad y paciencia que han mostrado en los últimos días en los que se han ejecutado los trabajos. Esta actuación de emergencia ha supuesto restricciones temporales en el suministro de agua a Vilafranca.
La alcaldesa ha explicado que con la nueva bomba, situada a una profundidad de 405 metros, permite extraer una cantidad de 50 metros cúbicos por hora. Hasta regularizar la situación del depósito de Vilafranca se seguirán realizando aportes mediante camiones cuba.
Vilafranca y Benassal forman un consorcio para explotar el pozo de Llargueres. Si se cumplen las previsiones con la nueva bomba el abastecimiento a Vilafranca estará garantizado. No obstante, desde el Ayuntamiento se ha pedido a la ciudadanía un uso racional y responsable del agua.
Cabe recordar que el manantial de La Tosquilla, tradicional abastecedor de Vilafranca, no aporta caudal en estos momentos. Tampoco se pueden utilizar los pozos de La Parreta, donde escasea el caudal. De este modo Llargueres, en el fondo del barranco de La Fos, se ha convertido en el principal punto de suministro de la localidad.
La alcaldesa ha agradecido la comprensión de los vecinos y también el trabajo de los técnicos que han realizado una operación compleja, como ha sido la sustitución de la bomba averiada.
