Los retos de volver a la normalidad tras las nevadas en Castellón
El interior de Castellón se ha despertado de blanco y muchos vecinos han tenido problemas para acudir al trabajo
Tras un fin de semana de copiosas nieves por la borrasca Filomena, el interior de Castellón se ha cubierto de blanco. Y más allá de las imágenesbucólicas que dejan nevadas históricas como la de estos días, muchas personas se han encontrado con problemas para realizar sus quehaceres diarios, como acudir al trabajo o ir al médico.
Pero los bomberos del Consorcio provincial de Castellón han estado junto a la Guardia Civil y a otros efectivos velando para que todo transcurriera con la mayor normalidad y arrimando al hombro para ayudar a la ciudadanía.
Durante todo el fin de semana han estado realizando tareas de limpieza de carreteras castellonenses, en los accesos principales a los municipios y también en el interior de los mismos.
También se ha facilitado la apertura de accesos a masías y granjas, y han atendido las distintas necesidades de los habitantes y ganaderos, en puntos como Vistabella, Forcall, Llucena y Morella, y se ha abierto accesos a otras infraestructuras como la planta embotelladora de Bejís o el camping de dicho municipio.
Además, se ha dado apoyo a los servicios sanitarios en distintas necesidades, como la recogida de pacientes de diálisis que no pueden desplazarse debido a la nevada.
Desde primeras horas del lunes, todas las máquinas del Consorcio han retomado las rutas de quitanieves y también para esparcir sal, debido al riesgo de formación de placas de hielo.
Cabe recordar que en su dispositivo diario el Consorcio de Castellón cuenta con 200 efectivos, 18 máquinas quitanieves, 8 vehículos salero, 5 máquinas pesadas de la Unidad de Maquinaria y Logística. Además en las últimas horas se han incorporado otras 14 máquinas pesadas de refuerzo para trabajar en pistas y caminos rurales de acceso a masías y granjas.