La mascarilla deja de ser obligatoria en la Diputación de Castellón, salvo en dos puntos

El uso de la mascarilla deja de ser obligatorio en las distintas dependencias de la Diputación de Castellón, salvo en la enfermería del complejo sociosanitario de Penyeta Roja y en el interior de los vehículos o medios de transporte de la institución cuando en su interior vayan dos o mas personas. Así se ha decidido en la reunión del comité de seguimiento y estrategia frente a la covid-19 celebrada en la jornada de hoy, en la que también se ha hecho un llamamiento al uso responsable de esta prenda de protección sanitaria en espacios cerrados de uso público en los que las personas transiten o permanezcan durante un tiempo prolongado.

Por lo que respecta a los salones de plenos, recepciones, comisiones o salas en las que de desarrollen procesos selectivos, se recuperarán los aforos previos a la irrupción de la pandemia manteniendo unas condiciones adecuadas de ventilación y recomendando el uso de la mascarilla cuando no sea posible mantener una distancia de seguridad interpersonal de metro y medio. Incluso se valorará la posible obligatoriedad si en algún momento se considera necesario.

Por otra parte, aunque deja de ser obligatoria, se recomienda su utilización a las trabajadoras y trabajadores de más de 60 años, inmunodeprimidas o embarazadas. Una recomendación que se hace extensiva al personal de teleayuda domiciliaria y de oficinas de recaudación, registros, Ofisam, taquillas del Castillo de Peñíscola, centros de educación especial y tecnificación deportiva de Penyeta Roja, residencia de estudiantes, ascensores, aseos, y zonas de trabajo con despachos compartidos y ventilación desfavorable.

También se recomienda el uso de la mascarilla al personal que tenga cualquier síntoma compatible con la covid-19 o que haya estado en contacto con personas positivas.

Según ha explicado el presidente de la Diputación, José Martí, «de lo que se trata es de adaptar el día a día de la institución a la nueva situación sanitaria y de recuperar, en la medida de los posible, las condiciones de trabajo previas a la pandemia». No obstante, Martí ha recordado que «aunque estamos mucho mejor, el virus continúa entre nosotros», razón por la que hace «un llamamiento a la prudencia de las trabajadoras y los trabajadores de la casa para que hagan un uso responsable de su libre derecho a decidir sobre el uso de la mascarilla, optando por su utilización en los casos en los que lo recomienda el comité de seguimiento y estrategia frente a la covid-19», que se constituyó el 16 de marzo de 2020.