La diócesis de Segorbe-Castellón inicia los preparativos del 775 aniversario de la sede episcopal en Segorbe
El Obispo inició con el Arciprestazgo de la Vall d'Uixó las reuniones para iniciar la celebración de esta efeméride
La diócesis de Segorbe-Castellón celebrará el próximo año el 775 aniversario de la sede episcopal en la capital del Alto Palancia y por ello el obispo D. Casimiro ha escrito una carta pastoral con motivo del año jubilar diocesano.
Para preparar esta efeméride, el obispo ha iniciado su ronda de contactos con todos los arciprestazgos de la diócesis y el de la Vall d'Uixó ha sido el primero en celebrar este encuentro en el que han estado presentes los representantes de las parroquias de la Vall d'Uixó, Xilxes, Alfondeguilla, Moncofa y Almenara. La reunión estuvo presidida por el Obispo y por el Arcipreste, D. Marc Estela.
Tras la oración, por parte de los secretarios se realizó la presentación de los Consejos de Pastoral parroquiales y arciprestal, así como su funcionamiento. Posteriormente, el Obispo pasó a exponer la Carta Pastoral. “En este año el Señor nos ofrece una gracia especial, no solo por el Proceso que a nivel universal se ha puesto en marcha, sino también porque nos estamos preparando para el Año Jubilar”, dijo al inicio de su intervención.
Este va a ser también un “camino de oración y de reflexión, para ver donde estamos, que necesitamos, cual es la llamada que el Señor nos hace, cual es el camino que nos va marcando”, y lo hacemos “en plena comunión con la Iglesia Universal”, continuó. En este sentido, D. Casimiro recalcó que la Fase Diocesana del Sínodo de los Obispos y la Reflexión Diocesana “no son dos procesos paralelos, son el mismo, coinciden, ya que la consulta del Sínodo está integrada en la Reflexión”.
También exhortó a todos a ser agradecidos, y a “acoger esta gracia y todos los dones que el Señor nos va a ofrecer a raudales”, pero para ello y ante las dificultades es muy importante “abrirse a la acción del Espíritu”. “Caminemos juntos – dijo – cada uno según su vocación, carisma y ministerio recibido, pues todos tenemos algo que aportar”.
La Carta, que lleva por título `La Iglesia diocesana en Jubileo: de la memoria agradecida, a la comunión vivida y el compromiso misionero´, tiene “una triple perspectiva: pasado, para dar gracias y para pedir perdón; para vivir el presente desde la comunión; y desde ahí salir a la misión”, puntualizó.