Diez pueblos de Castellón que visitar este verano
En elperiodic.com hacemos un repaso a diez municipios de la provincia de Castellón a los que hacer una escapada en este atípico verano que se avecina
Este verano será complicado hacer esos largos viajes que muchas familias, parejas y amigos hacen en el periodo estival. Y, en caso de que se puedan realizar, quizás el miedo al coronavirus haga que muchos prefieran quedarse en sus casas o, a lo sumo, viajar dentro de su propia provincia o comunidad autónoma. Por ello, en elperiodic.com os planteamos algunos de los pueblos más atractivos de la provincia de Castelló.
Vilafamés
Este pueblo de 1.842 habitantes está ubicado en el interior de Castelló, en la comarca de la Plana Alta, y coronando el alto de la mola de la Sierra de les Conteses. Esto proporciona unas vistas espectaculares de su entorno. Sus monumentos, sus calles medievales y zigzagueantes y sus casas son otro de los atractivos de la localidad. La ciudad está rodeada por una muralla datada en el siglo XIV que engloba los monumentos más atractivos de la ciudad: el castillo, el Palacio de Batlle o la Ermita de San Ramón.
Morella
Una ciudad que no podía faltar en esta recomendación es la capital de la comarca de Els Ports. Este municipio está considerado como uno de los más bonitos de España. Su vista desde lejos ya llama la atención, con todas las casas arremolinadas y rodeadas por una muralla. Además, se ha declarado como Conjunto Histórico-Artístico su castillo medieval por su gran conservación. Desde lo alto de la fortaleza se puede ver toda la comarca de Els Ports. Pasear por sus calles es como viajar a épocas pasadas. Tampoco puede faltar una visita al Palacio del Gobernador, la Iglesia Arciprestal de Santa María y el Convento de San Francisco.
Peñíscola
No solo en el interior hay lugares idílicos que visitar. En la costa, también hay destinos más que atractivos como Peñíscola. El municipio también está incluido entre los pueblos más bonitos del país. Peñíscola, en el Baix Maestrat, aúna mar e historia. El casco antiguo emerge con su imponente muralla del siglo XVI. En él se encuentra el castillo templario de estilo románico. También es obligada la visita a la Iglesia de Santa María y al parque de artillería.
Ares del Maestrat
El pueblo, encadajo entre la Mola del Castell y la Mola d’Ares, es uno de los destinos principales del área del Maestrazgo. Todo su casco es Conjunto Histórico-Artístico por la gran conservación de sus monumentos. En este pueblo de 186 habitantes es imprescindible la visita a los restos de su antiguo castillo, a la Iglesia de la Asunción de la Virgen o la Antigua Longa.
Castellfort
También en la comarca de Els Ports encontramos el pueblo de Castellfort, de 183 habitantes. Esta localidad, con mucho encanto, se puede ver desde lo lejos, desde donde se ven sus casas rodeadas de bancales. Un destino rural en toda regla. Su ubicación le ofrece unas preciosas vistas desde la Finestra del Mirador de todo el entorno de Els Ports. En el interior del pueblo se descubre una impresionante estructura medieval con diversos monumentos civiles y religiosos como la Cofradía de San Antonio de Abad, los edificios de la Ermita de la Virgen de la Fuente y la Ermita de San Pedro.
Olocau del Rey
Este pueblo de Els Ports de 119 convecinos parece estar camino de ninguna parte. Aquí predominan las casas de piedra y destacan edificios como el Palacio del Marqués de Figuera o la antigua cárcel. La Iglesia parroquial de la Virgen del Pópulo, datada del siglo XIII, es otro de los atractivos del municipio. Subir al castillo de Olocau del Rey es otra de las actividades obligatorias en la visita a esta localidad y, pese a estar en ruinas, tiene un gran poder evocador.
Culla
Culla es un municipio medieval en la comarca del Alt Maestrat. La localidad cuenta con nueve pedanías dispersadas por la Sierra de Seguras, una zona de abrupta orografía y con paisajes espectaculares. Sus edificios, perfectamente conservados, han convertido a Culla en Conjunto Histórico-Artístico. En una visita a este municipio hay que acudir a su casco antiguo, en el que se encuentran edificios antiguos rehabilitados. La Ermita de San Roque y la Iglesia Parroquial del Salvador son dos edificios que merecen una visita. Su castillo, pese a haber sido destrozado durante las Guerras Carlistas también debe ser tenido en cuenta.
Villahermosa del Río
En la comarca del Alt Millars, fronteriza entre Castelló y Teruel, se encuentra este pueblo de 489 habitantes. Ubicado sobre la falda de una colina, este municipio destaca por sus casas blancas apiladas. Un lugar primordial para los amantes de la naturaleza, dado que se encuentra junto a la ruta de la Cascada del Río Carbo y del Parque Natural de Peñagolosa. En el pueblo, los lugares de interés principales son la Iglesia de Nuestra Señora de la Natividad y el castillo. Además, sus calles de origen árabe son otro aliciente de esta localidad.
Villafranca del Cid
En el Maestrazgo, en la comarca de Els Ports, ahí está ubicado este municipio castellonense. Esta localidad brilla por su casco antiguo con casonas solariegas y callejuelas y pasadizos de recuerdo medieval. Especialmente interesantes son la Torre de Conjurar, el ayuntamiento o el Portal de San Roque. En el mismo ayuntamiento se halla el retablo de la Virgen del Losar.
Sot de Ferrer
Este pueblo, situado a orillas del río Palancia y entre las Sierras de Espadán del Norte, cuenta con un gran atractivo principal: su palacio. Este edificio fue a partir del cual se originó el municipio y está construido de cal, arena y piedra. Otro monumento que visitar es el Molino del Señor, levantado para la moltura de cereales. A la salida del pueblo se encuentran el Calvario y la Ermita de San Antonio de Padua.