¿Crees que conoces realmente la Vía Verde de Benicàssim y Oropesa? Descubre la historia que se esconde detrás de ella
Antes de convertirse en una vía verde, este tramo ferroviario fue durante décadas una arteria vital que conectaba la Comunitat Valenciana con Catalunya
La Vía Verde que une las localidades costeras de Benicàssim y Oropesa del Mar se ha convertido en uno de los destinos favoritos para amantes de la naturaleza y el deporte en la provincia de Castellón. Este antiguo trazado ferroviario, reconvertido en un sendero para ciclistas y peatones, ofrece un recorrido inolvidable a través de un paisaje costero de gran belleza, con vistas panorámicas a calas y playas vírgenes.
Un viaje en el tiempo sobre raíles
Antes de convertirse en una vía verde, este tramo ferroviario fue durante décadas una arteria vital que conectaba la Comunitat Valenciana con Catalunya. El traqueteo de los trenes y el humo de las locomotoras eran una estampa habitual en este paraje. Sin embargo, el avance de la tecnología y la construcción de nuevas líneas ferroviarias más rápidas y eficientes provocaron el cierre de esta línea a finales del siglo XX, construyéndose las nuevas a pocos kilómetros más al oeste.
Durante años, las vías permanecieron abandonadas, hasta que a principios del siglo XXI se inició un proyecto para reconvertirlas en una vía verde. Las obras de acondicionamiento se prolongaron durante varios años y, finalmente, en el año 2009 se inauguró oficialmente la Vía Verde de Benicàssim a Oropesa.
Un recorrido entre el mar y la montaña
La Vía Verde serpentea a lo largo de la costa, ofreciendo unas vistas espectaculares del mar Mediterráneo. A lo largo del recorrido, los senderistas y ciclistas pueden disfrutar de la brisa marina, de la suave pendiente y de la tranquilidad del entorno. Además, la ruta atraviesa diversos túneles y puentes que añaden un toque de aventura al recorrido.
Uno de los mayores atractivos de esta vía verde son las numerosas calas y playas a las que se puede acceder desde el sendero. Algunas de ellas son de difícil acceso por carretera, lo que las convierte en auténticos paraísos para aquellos que buscan tranquilidad y naturaleza.
Un legado histórico y natural
La Vía Verde de Benicàssim a Oropesa no es solo un espacio para el ocio y el deporte, sino también un lugar con un gran valor histórico y natural. A lo largo del recorrido se pueden encontrar vestigios del antiguo ferrocarril, como antiguos apeaderos y túneles, que nos transportan a otra época. Además, la vegetación autóctona y la fauna que habita en la zona convierten este espacio en un auténtico tesoro natural.
Un destino para todos
La Vía Verde de Benicàssim a Oropesa es un destino ideal para todos los públicos. Tanto los amantes del ciclismo como los aficionados al senderismo pueden disfrutar de este recorrido, que se adapta a diferentes niveles de dificultad. Además, la ruta es accesible para personas con movilidad reducida en muchos de sus tramos.
Si estás buscando una actividad al aire libre en contacto con la naturaleza, no dudes en recorrer la Vía Verde de Benicàssim a Oropesa, uno de los senderos más conocidos y queridos de Castellón y la Comunitat Valenciana.