El patronato de la Fundació acuerda mantener la actividad
El patronato de la Fundació per la Pilota Valenciana se ha reunido este lunes en sesión extraordinaria para analizar la situación de la entidad y el futuro más inmediato de la pilota profesional después de la contratación por parte de la Federació de Pilota de la mayoría de los jugadores profesionales para las temporadas 2024 y 2025.
Desde su condición de presidente, Juan Ureña ha dirigido el patronato y ha expuesto que la Fundació tiene que continuar la actividad hasta que acabe el año, tal y como, además, informan los economistas y juristas consultados por la entidad.
Antes de la votación, todos los patrones han manifestado su punto de vista y han mostrado su voluntad para ayudar a conseguir lo mejor para el deporte de la pilota valenciana. Una vez hecha la votación, se ha acordado mantener la actividad según estaba previsto y programado hasta que acabe el año 2023.
Hay que señalar que han ejercido su derecho a voto los representantes de los diferentes patrones de la Fundació que han estado presentes, cargo en el cual se han estrenado el nuevo presidente de la Diputación de València, Vicent Mompó, y la nueva regidora de Deportes del Ayuntamiento de València, Rocío Gil.
Aunque no tenían derecho a voto, en la reunión y votación también han estado presentes los pilotaris Marrahí, Giner y Puchol II en representación de los jugadores profesionales. Además, han tenido la oportunidad de expresar su opinión, como así ha hecho Julio Marrahí.
Finalmente, el patronato también ha acordado hacer otra reunión a finales de septiembre o en el mes de octubre para analizar el futuro de la Fundació y sus competencias a partir del 1 de enero de 2024. De esta manera, los componentes del nuevo gobierno valenciano habrán tenido tiempo de estudiar y evaluar toda la documentación, incluyendo las alegaciones presentadas por la Fundació a la Consellería, para decidir cuál es el mejor camino para la pilota profesional.
En este sentido, la Comisión Ejecutiva en pleno de la Fundación ha manifestado que pone sus cargos a disposición de los nuevos gobernantes y, por extensión, nuevos patrones de la entidad, porque son ellos quien tienen que decidir el futuro de la pilota profesional, y no “personas particulares que se mueven por intereses privados”.
Así mismo, se ha recordado que la Fundació se creó para resolver los problemas que los pilotaris profesionales tuvieron con la empresa privada que organizaba las competiciones y que en sus cinco años de funcionamiento se ha conseguido una estabilidad para los jugadores, que se ha duplicado el presupuesto y se ha incrementado considerablemente el número de pilotaris con ficha, mejorando además sus condiciones laborales, más aquellos que son contratados de manera eventual para disputar competiciones. Todo esto, conseguido con una pandemia que alteró todas las previsiones y con la posterior complicada coyuntura económica.