Arrancan las excavaciones en el cementerio de Paterna para recuperar a las víctimas de la Guerra Civil
El área de Memoria Histórica de la Diputació de València subvenciona el proyecto a petición de los familiares de ambos bandos
El diputado Ramiro Rivera acompaña a las familias en el inicio de la excavación, impulsada por el testimonio de Fernando Castelló, hijo de uno de los represaliados. La primera saca que se busca es de 1941
La Diputació de València mantiene su apuesta por la memoria histórica dando respuesta a las peticiones de familiares que se movilizan para recuperar los restos de seres queridos que fueron represaliados en el marco de la Guerra Civil y la dictadura franquista. En esta ocasión, el área que dirige Ramiro Rivera ha subvencionado las excavaciones que se iniciaron este lunes en la explanada del cementerio de Paterna, donde se espera hallar distintas sacas con los restos de víctimas tanto de la retaguardia republicana como del franquismo.
La delegación de Memoria Histórica de la Diputació de València afronta el quinto año de su política de subvención de exhumaciones e identificación genética de los fusilados durante la Guerra Civil y el franquismo con el proyecto que afecta al cuadro segundo del cementerio de Paterna. Esta fosa, a diferencia de lo que es habitual, no está señalizada y pese a conocerse su existencia no podía asegurarse cuál era su ubicación concreta.
Las indagaciones de los familiares se vieron impulsadas por el testimonio de Fernando Castelló, hijo de uno de los represaliados, que recordaba el lugar donde fueron enterrados. Este testimonio se pudo confirmar finalmente con los resultados del georadar, que durante 2020 se empleó para asegurar la existencia de restos en la zona. Las noticias orales y la prospección del georadar hablan de diversas fosas tanto de la retaguardia republicana como de la época franquista, en el suelo de este patio, todas ellas sin señalizar. Además, se tiene constancia de que de ellas se extrajeron cuerpos para trasladarlos al Valle de los Caídos.
Las primeras excavaciones se centran en la saca que corresponde al 16 de mayo de 1941, día en el que fueron asesinadas 20 personas; cuatro de ellas fueron enterradas en nichos individuales y el resto se cree que continúan en la fosa. En palabras de Ramiro Rivera, “es necesario que sigamos trabajando por la dignidad de todas las personas que fallecieron por sus ideas, y por eso desde la Diputación contribuimos a que los restos de las víctimas sean recuperados por las familias”.
El coste total del proyecto supera los 54.000 euros y ha sido subvencionado íntegramente por la delegación provincial de Memoria Histórica a solicitud de los familiares.
