Plato ligero: un dulce tradicional y desconocido de la Semana Santa que tiene su origen en Albatera (Alicante)
Este postre es el plato típico por excelencia de la Semana Santa en esta localidad alicantina
Si hablamos de los dulces típicos de la Semana Santa, sin duda la reina es la mona de Pascua, aunque en el municipio alicantino de Albatera el postre estrella es el Plato Ligero. Esta receta tradicional es toda una desconocida en el resto de la Comunitat Valenciana, pero los albaterenses disfrutan de ella como uno de los alimentos más especiales de su gastronomía en esta época.
Tanto es así, que la Asociación Amas de Casa de Albatera realiza todos los años un concurso para elegir el mejor plato ligero de la localidad, y que esta edición ha ganado Juanjo Cerdá.
Este plato típico solo se come en Semana Santa, especialmente Lunes de Pascua y Lunes de San Vicente, aunque hay quien no se puede resistir a probarlo y son muchos los que también lo cocinan para el almuerzo de Viernes Santo, y el domingo previo a San Vicente, cuando se celebra la romería de la Virgen del Rosario en este municipio de la Vega Baja.
Su origen no está muy claro, pero según nos cuenta María Elvira Rufías, presidenta de las Amas de Casa, “mi abuela siempre decía que se hacía después de Pascua, con las monas que quedaban y se ponían duras, era una forma de aprovecharlas”.
En cuanto al nombre, nos traslada que “de ligero no tiene nada, se le llama así porque se come muy ligero, es como un suspiro y también por todo el merengue que lleva”.
Las Amas de Casa, en su libro de recetas tradicionales de Albatera recogen este postre como no podía ser de otra forma. Una receta sencilla, cuya base principal es la mona de Pascua, cubierta con yemas de huevo, azúcar, leche y licor al gusto, después se le añaden las claras a punto de nieve y se le van dando forma, finalmente un toque de canela y al horno. Eso sí, los más golosos también le pueden echar chocolate, añadiendo un toque extra a la receta original.
Aunque su origen se encuentra en Albatera, también se come en algunos pueblos de la Vega Baja como Cox, donde le llaman plato subido o Redován.