Paiporta se posiciona, a petición de Compromís, contra la regresión democrática de las últimas leyes aprobadas por PP y VOX

El pleno de Paiporta aprobó una moción de Compromís para posicionarse contra la regresión democrática que supone la aprobación de cinco leyes en el parlamento valenciano, por la vía de urgencia, por parte del bipartito PP-VOX que gobierna la Generalitat. La propuesta contó con los votos a favor de Compromís y PSPV-PSOE, y en contra de las formaciones de derecha y ultra-derecha.

Las cinco leyes, en palabras del portavoz de Compromís por Paiporta, Pep Val, tienen el objetivo de “hacer desaparecer el valenciano de las escuelas, favorecer la educación privada frente a la pública, humillar a las víctimas del franquismo, manipular y controlar los contenidos de la televisión pública valenciana, dar mayor impunidad a los políticos corruptos y hacer opacas las actividades de los dirigentes políticos para que sigan haciendo negocio con sus empresas”. Para Val, es necesario “parar el que supone una regresión democrática sin precedentes”.

La moción expone como, en 2015, “la ciudadanía valenciana, harta de la manipulación informativa de Canal 9, los recortes en educación, la regresión lingüística en el uso y fomento del valenciano y la corrupción sistémica a las administraciones valencianas, propició un cambio político”. Sin duda, continúa el texto, “la mayor lacra que manchó la imagen del País Valenciano fue la corrupción. Casos como Taula, Azud, Gürtel, Brugal, Carlos Fabra, Cooperación, Emarsa, Erial, Imelsa, de los trajes, Fórmula 1… situaron València en el eje vertebrador de una administración paralela organizada para delinquir y desviar dinero público”.

Fruto de este clamor popular, el gobierno del Botànic aprobó normas destinadas a recuperar la dignidad perdida y el crédito reputacional del País Valenciano. Leyes como la de Plurilingüismo, enfocadas a recuperar el valenciano en las aulas, la de Memoria Democrática, para devolver la digniitat a las personas asesinadas por el Franquismo, la de creación de À Punt, para garantizar unos medios de comunicación públicos, independientes y de calidad, o la de Transparencia, para garantizar que la corrupción no volviera a ser la marca de la Generalitat.

El PP y Vox, por la vía de urgencia y “para tapar el inicio del juicio a Eduardo Zaplana, presidente de la Generalitat del Partido Popular y padre político de Carlos Mazón”, ha llevado adelante una serie de leyes que suponen una cesión a la ultra derecha franquista y antivalenciana y llevan a los valencianos y las valencianas diez años atrás.

Reaccionarios y autoritarios

Ante un “comportamiento reaccionario y autoritario” del gobierno de la Generalitat, Paiporta reclama que “se continúe desarrollo la Ley de Plurilingüismo, que se garantice la enseñanza en valenciano mediante el aumento progresivo de los contenidos en lengua propia”, que la Generalitat “mantenga la Ley de creación de À Punt con su redactado actual y garantice la necesidad de mayorías reforzadas para el control del ente de comunicación pública”.

A continuar, también, “en el desarrollo de la actual Ley de Memoria Democrática, a la dignificación de las víctimas, la recuperación de cuerpos por que sus familiares puedan dar digna sepultura”, además de “perseguir los actos de exaltación, promoción y apología del franquismo y el fascismo”.

Por último, el texto aprobado por la mayoría del pleno insta la Generalitat Valenciana a “seguir desarrollando la actual Ley de Transparencia y Buen Gobierno de la Generalitat Valenciana, para el acceso a la información pública de la ciudadanía y para la garantía de prácticas éticas y transparentes de los cargos públicos”, y a “sequir desarrollando la actual Ley de la Agencia de Prevención y Lucha contra el Fraude y la Corrupción de la Comunidad Valenciana, a garantizar su independencia y mantener la necesidad de mayorías reforzadas para nombrar sus miembros y continuar con la persecución de las prácticas corruptas a las administraciones públicas valencianas”.