El empresariado paiportino se suma a la solidaridad con el pueblo ucraniano
La alcaldesa de Paiporta y la regidora de Ocupación y Comercio han visitado las instalaciones de la empresa local EMO, que ha hecho una donación de tres palés de material ortoprotésico
El comercio local paiportino y su tejido empresarial se ha sumado a las muestras de solidaridad y ayuda al pueblo ucraniano.
Coincidiendo con el agravamiento del conflicto y el llamamiento a la solidaridad de paiportinos y paiportines, la empresa paiportina EMO ha querido sumar su colaboración a la campaña de recogida de material, donando un lote de tres palés de material ortoprotésico, que incluye sillas de ruedas, muletas, andadores, bastones o calzado para pie diabético, así como mascarillas quirúrgicas para personal sanitario.
Esta semana la alcaldesa de Paiporta, Maribel Albalat, y la regidora de Ocupación y Comercio, Olga Sandrós, han visitado las instalaciones de la factoría de EMO en el polígono La Pasqualeta para agradecer personalmente la donación al director de la fábrica, Pedro Fernández, y al director de operaciones, Gabriel Gallego.
“EMO es una empresa muy arraigada en Paiporta. A la pandemia se reinventó para adaptarse a las nuevas necesidades de la sociedad; ahora nos vuelve a mostrar su implicación y concienciación social con esta donación. Queremos mostrarlos todo nuestro agradecimiento por este gesto hacia una población que necesita mucho esta ayuda”, ha manifestado la alcaldesa de Paiporta, Maribel Albalat.
La regidora de Economía, Ocupación y Comercio, Olga Sandrós, ha añadido que "desde el Ayuntamiento queremos expresar todo nuestro reconocimiento a la labor solidaria de esta empresa puntera paiportina, y nuestro apoyo a estas iniciativas tan necesarias en una situación extrema como la que vive el pueblo ucraniano, más aún si se trata de material tan vital para las personas más necesitadas".
EMO es un ejemplo de adaptación y resiliencia. Esta empresa que proporciona material a toda la sanidad valenciana, con más de medio siglo de experiencia, reconvertía su producción ante la extensión del coronavirus y las nuevas necesidades del mercado durante la pandemia. Ahora, frente a otra alerta, en este caso humanitaria, vuelve a responder al llamamiento solidario.
Su implicación y arraigo con Paiporta se refleja en su plantilla, que se nutre principalmente de trabajadoras y trabajadores del pueblo.
