Vados e IBI
En la espera para hablar con el concejal Juan Granell sobre legalidad e injusticias, tuve tiempo para conversar con Juan Fuster, el edil que tiene encomendada la difícil tarea de sanear unas cuentas, las del Ayuntamiento, demasiado rotas tras décadas de gastos desenfrenados e inversiones nefastas que ha dejado escuálidas las arcas de la casa de todos.
Confieso que tengo muy buen concepto de Fuster en cuanto a su capacidad como administrador, una opinión que, estoy seguro, comparte conmigo mucha gente.
Él me decía que el reto de llevar las cuentas en estos tiempos tan complicados le motiva y que las finanzas municipales, desde que se ha hecho cargo de ellas, han mejorado sustancialmente. No lo pongo en duda.
En mi comentario, en este escrito, quiero centrarme en una reflexión: el Ayuntamiento ha mejorado en el estado de sus cuentas a la vez que los ciudadanos nos hemos empobrecido. Creo que en la coincidencia de ambos hechos: mejora y empobrecimiento, todos podemos estar de acuerdo.
Tan fuera de duda está el varapalo que sufrimos los ciudadanos, que el otro día un amigo me decía muy enfadado: “Se nos está sangrando a los ciudadanos, obligándonos a poner vado en calles en donde no se puede aparcar, con la amenaza de poner mojones para impedir que entremos con nuestro vehículo por la puerta de nuestra casa. No hay que olvidar -me seguía diciendo- que cada ciudadano, además de pagar impuestos y tasas, ha pagado la calle, la acera y hasta por la fachada. Que nos obliguen a pagar de nuevo obligándonos a poner un vado para entrar el coche en casa, en una calle en donde no se ocupan plazas de aparcamiento es totalmente injusto”.
Pienso que es entendible que el Ayuntamiento cobre por un vado que ocupa un espacio público porque está impidiendo aparcar ahí a otro vehículo, pero ¿puede el Ayuntamiento pretender cobrar cuando el propietario tan solo pisa la acera para introducir su coche en su casa en una calle en donde no se ocupa ninguna plaza de aparcamiento porque en ella no se puede aparcar?
En una circular enviada a quienes introducen el vehículo en su casa sin haber solicitado la placa de vado, el Ayuntamiento les requiere a que lo soliciten y teoriza para justificarse diciendo que “son medidas de protección para la seguridad de la acera y de los peatones”.
Se nos ha dicho mil veces que las tasas de basura deben repercutirse en su totalidad entre los ciudadanos con el fin de que sea de coste cero para las arcas municipales. Es entendible de que sea así y que el gasto corra a cargo de los usuarios, pero ¿qué coste sufre el Ayuntamiento cuando alguien no ocupa una plaza de aparcamiento e introduce su vehículo en su casa?
Vayamos al IBI. Se incrementaba el IBI porque un inmueble valía más y había que revalorizar la base imponible en base a ese incremento. De acuerdo, pero con el mismo razonamiento ¿No habría que bajar la base imponible del IBI en momentos, como el actual, en el que un solar vale la décima parte de lo que valía y una vivienda menos de la mitad? ¿Cuánto vale un “solar” en una urbanización fantasma como la de S. Gregori? ¿Por qué hemos de pagar IBI por un “solar” que no lo es, además de unos avales que ya son sangrantes y eternos?
Tengo la tranquilidad de saber que el PP tiene en Juan Fuster a una persona muy válida pero, en los tiempos actuales, tal vez sería más lógico reflexionar a nivel político si no sería bueno que todas las decisiones fueran encaminadas a sanear las economías familiares.
Francisco con los inmigrantes
Recientemente el nuevo Papa se ha desplazado a Lampedusa, uno de los lugares en los que la inmigración “ilegal” satura los centros de acogida y los cementerios.
Allí, el Papa Francisco se ha expresado con estas palabras: “Pedimos ayuda para llorar por nuestra indiferencia, por la crueldad que hay en el mundo, en nosotros y en todos aquellos que desde el anonimato toman decisiones socio-económicas que abren la vía a dramas como estos. Pedimos perdón por aquellos que con sus decisiones a nivel mundial han creado situaciones que conducen a estos dramas.”
El Papa ha salido en defensa de “los hombres que buscan cualquier cosa para mantener a sus familias” y ha seguido diciendo: “¿Quién es el responsable de la sangre de estos hermanos? Hemos caído en el comportamiento hipócrita, miramos al hermano medio muerto y tal vez pensamos: pobrecito y continuamos nuestro camino, no es asunto nuestro y así nos quedamos tranquilos.”
Me gusta escuchar a este Papa que se enfrenta a los graves problemas de la iglesia: Ha destituido a los directivos corruptos del banco de las finanzas vaticanas; ha denunciado a los pederastas; se pone del lado de los inmigrantes (mientras aquí Rouco, en una entrevista, desconoce lo que son los Centros de Internamiento de Extranjeros) y trata de golpear conciencias diciendo lo que sus antecesores han callado. No se puede estar de acuerdo con él y a la vez con sus predecesores.
Mi opinión es que se debería de cobrar vado a todo aquel que requiera de entrada de vehículos a través de la acera prohibiendo que en la misma se aparquen vehículos, al resto de situaciones lo que se debería de plantear es cobrar por mantenimiento de la acera, ya que no es lo mismo es desgaste de los ciudadanos de a pie que la circulación de vehículos por las mismas, por supuesto de menor cuantía que que un vado. En los diferentes medios de comunicación en lo que he leído noticias de Sr. Fuster siempre ha hablado de renegociar contratos, que considero que es una política acertada, ni más ni menos al igual que en la privada, y siempre he sido de los que piensa que las tasas las han de pagar quienes las utilizan pagando el precio de coste del servicio, por que es muy injusto que yo que no utilizo un servicio lo haya de financiar, sí ese es el motivo del incremento de las mismas también me parece acertado, ahora bien creo necesario reducción de impuestos para dar un respiro a la sociedad.