Todo se hace por nuestro bien

Se cierran hospitales. Se despide a médicos y a enfermeras… Todo se hace “para mantener el sistema público de salud”.

Se despiden funcionarios. Se les baja el sueldo. Se cierran organismos y empresas públicas… Todo se hace para “mantener una administración eficaz”. Añado: “En la que no se toca a los 700.000 funcionarios -según cifras de Montoro- puestos a dedo”.

Se aumenta el número de alumnos por clase. Se reducen becas. Se aumentan las tasas académicas… “Todo para mantener una educación pública de calidad”.

Se ponen tasas para recurrir a la justicia ya sean para reclamar una multa de tráfico o al vecino que no paga las cuotas de su comunidad. Todo para “mantener un sistema judicial justo para todos.” (Menos mal que a veces con la protesta de los jueces y la denuncia de la Defensora del pueblo se logra deshacer parte del desaguisado).

Se incrementan impuestos generalistas y se aparcan impuestos directos (más justos) y se facilita que los defraudadores se salgan de rositas mientras se mantienen impuestos de risa en las SICAVs y se facilitan deducciones y bonificaciones para que el impuesto de Sociedades se quede en un diez por ciento real. “Todo para que la economía funcione y vuelva la confianza de los inversores.”

Se eliminan los fondos destinados a investigación y se cierran centros expulsando al exilio a los investigadores españoles, dejando así cortadas líneas de trabajo y dejando al país sin un claro motor de futuro… “Todo para reducir el déficit. Cuando no tengamos déficit empezaremos a crecer”.

Se facilita el despido laboral, los contratos se convierten en precarios y los convenios colectivos nulos. Para acabar con los EREs se promulga una ley que los facilita… “Todo para acabar con el paro y crear empleo”.

Los jóvenes bien formados han de emigrar de este país. Se trata de “movilidad exterior” según nos dice la flamante ministra ¿de empleo? Fátima Ibáñez.

Quienes nos gobiernan aplican todas esas medidas y nos anuncian nuevos “ajustes” con el fin de poner “orden en la economía”, un orden que se olvida de los más de seis millones de parados y solo busca atender los intereses de los países del norte de Europa.

Para garantizar los cobros de sus inversiones especulativas y garantizarse los retornos, ante el riesgo de que ocupe el poder una nueva mayoría distinta a la que ahora sufrimos, PP y PSOE reformaron la Carta Magna sin intervención del pueblo soberano.

Si tenemos gobiernos que se pliegan al dictado de poderes foráneos; si nuestros títeres están ahí para atender las instrucciones recibidas de Alemania y sus vecinos del norte; si ésa es la causa de nuestros males y sus soluciones no funcionan ¿Cuándo empezaremos a decantarnos por adquirir productos de empresas españolas, aunque tengamos que taparnos la nariz al saber que se van también a fabricar a Bangladesh en busca de sueldos de explotación y miseria? ¿Cuándo nos pondremos a rechazar a Bricos y Marks y todos los productos que llevan el sello de “Made in Germany” con mano de obra asiática? ¿Aún no? Mientras tanto, ellos, crecidos, siguen dictando: Menos ayudas al desempleo, menos pensiones,…

Ya sé que llegados a este punto más de un lector pensará que “Alemania actúa con rigor porque es ella la que ha de poner el dinero e hizo bien sus deberes”. Y ciertamente ella es la que más dinero pone (el 27,14). Francia se le acerca, pone un 20 y no le hacen ni caso; pero ¿sabemos que España e Italia, dos países con muchas dificultades ponen entre los dos más que Alemania, sea para intervenir Portugal o Chipre? España e Italia son dos países con dificultades muy graves, ponen muchísimo dinero y encima reciben reprimendas por “derrochadores”. Hay una gran diferencia entre ricos y pobres, entre los que mandan y los que no: mientras Alemania tiene que acudir al Parlamento alemán a pedir autorización para apoyar a los países quebrados y en curso de quiebra, aquí en España, sin poder, ponemos lo que nos toca en el reparto, ponemos los parados, dejamos vacío nuestro estado del bienestar y soportamos sus improperios y una política trasnochada que solo a ellos les beneficia, que hunde a Europa y que ¡no se dan cuenta! también acabará hundiéndonos a todos.

...Y AHORA LAS PENSIONES

¿Se acuerdan? Cuando ZP, siguiendo órdenes, congeló las pensiones (las más bajas no), se armó la marimorena. Era el mayor recorte social, era contravenir el Pacto de Toledo, era un ataque a los pensionistas, era… Quien no lo recuerde que repase lo publicado por los medios.

Llegaron al poder con abrumadora mayoría y bajo ese escudo han hecho exponencialmente lo que hizo cabizbajo ZP, tocando la última promesa que les quedaba por incumplir poniendo a los jubilados en la recta de quedarse con una pensión ínfima por la vía de una más que probable futura inflación.

Se conoce esta noticia el mismo día en que sabemos que el paro que lo cogieron en el 21 lo han pasado al 27,3 %. Ellos siguen obcecados mirando el déficit y cabizbajos ante Merkel, mientras el PSOE sigue perdido purgando sus culpas.