"Si El Mundo paga les cuento la Guerra Civil"
Estuve en Castellón asistiendo a una conferencia, dentro de los actos programados en la Semana de Novela Negra. Uno de los escritores, en su exposición, nos recordó los asesinatos de prostitutas que hace algunos años situaron a Castellón en primera página de los noticiarios del ámbito local al nacional. ¿Quién estaba tras los crímenes? ¿Había un único asesino? ¿Tal vez en una alquería de los alrededores alguna mujer descubrió alijos muy grandes de drogas y un segundo asesino aprovechó para deshacerse de ella arrojando pistas falsas? ¿Era una de las mujeres la encargada de guardar la droga? Demasiadas preguntas y la verdad “¿Dónde está la verdad? -dijo el novelista- ¡Juzguen Uds. mismos!
Otro de los escritores participantes en el acto utilizó otro asesinato, ocurrido también en Castellón, de un conocido abogado para preguntarse: ¿Le asesinaría algún cliente culpándole de su ruina? ¿Fue alguien finalmente condenado que se vengó del abogado? ¿Fue alguien que vio el coche, le gustó y le dio el arrebato de robárselo? No parece muy lógico que esta última fuera una respuesta válida, pero créanme si les digo que, en versión del Jefe de la Policía de Castellón, es esto último lo que realmente debió haber ocurrido.
Pasemos de estos hechos al 11-M. Hay todo un gran cóctel de datos en donde se juntan:
-Un gobierno que dice que es ETA, porque esa versión le interesa cara a las elecciones. Una oposición que se moviliza diciéndole al gobierno que miente. Una calle sensibilizada por un horrendo crimen que lo vincula a la participación española en la guerra de Irak. (La realidad de los hechos - según cuenta Reinares en su libro “Matadlos”- fue una venganza por la detención de un destacado grupo yihadista).
- Se investiga lo ocurrido. Se cita a declarar a decenas de testigos. Las declaraciones y las pruebas se recogen en un sumario amplísimo y el juicio y su veredicto son transmitidos por televisión y analizados minuciosamente desde todos los rincones del mundo. Hay condenados aquí, condenados fuera de España y otros están en busca y captura.
- Dos periodistas de El Mundo siguen calentando el tema y la juez Cillán les cree.
¿Hay cabos sueltos? ¿Hay dudas? Naturalmente como en cualquier sumario. Se dice que los condenados, por ellos solos, no pudieron colocar las mochilas. Se dice que una mochila desapareció y que fue colocada como prueba falsa. Se dice que un tren no fue analizado. Se dice que el explosivo (un exiguo 1%) coincide con el que utiliza ETA.
Se reabre el caso por el fiscal general de Estado y Torres-Dulce le da carpetazo. La decisión produce cabreo en mucha gente: “¡No quieren investigar! ¡Quieren tapar el tema! ¡Esto es un complot!” Es una rabieta innecesaria, porque todos sabemos que cualquier sentencia puede reabrirse si se aportan nuevas pruebas. No las hay. Nunca las hubo.
En mi opinión el 11-M se utilizó políticamente. Se alimentó por intereses mediáticos. Se cebó en el dolor los familiares de las víctimas y fue útil para exacerbar los ánimos, insistir en algo tan etéreo como la “autoría intelectual” y seguir sembrando interesadas dudas.
Los que quieran que sigan pensando que el 11-M se cerró en falso y que la verdad está en el juzgado 43. Yo puedo pensar que el abogado de Castellón fue horrendamente asesinado por otros motivos que me parecen más literarios. La imaginación está al alcance de cualquiera.
DATOS ADICIONALES:
1) Dos testigos protegidos (dos mujeres rumanas) han acusado al diario El Mundo de presionarlas para que se retractasen de su declaración y exculpasen a Inmal Zougam, según denuncia el abogado Gonzalo Boye. El abogado presentó denuncia por “maniobras tendentes a influirles para desvirtuar sus propios testimonios”.
2) La juez Coro Cillán que ha mantenido el 11-M abierto en el juzgado 43 ha sido acusada de prevaricar por ordenar precintar la discoteca Moma y es una juez sancionada varias veces por el Poder Judicial. La última por prevaricación. La juez dijo que los Tedax recogieron pruebas tras el 11-3-04 pero no las documentaron suficientemente.
3) Ningún mando policial que investigó el caso ha dado credibilidad a la versión de que fue ETA. Esos mandos fueron acusados mediáticamente (La Cope y El Mundo). La mujer de uno de ellos, Rodolfo Ruiz, comisario de Puente Vallecas, no pudo soportarlo y se suicidó. Pilar Manjón lleva diez años de insultos y su asociación sigue ninguneada por la Comunidad de Madrid.
4) El inspector Mosquera, suspendido, procesado y condenado, fue a Cillán a darle datos sobre una reunión en Ginebra de los servicios secretos para montar un atentado. El policía dijo a la juez que en Leganés estaba Rubalcaba. Luego se desdijo.
5) Manos limpias dijo que se ordenó destruir los trenes siniestrados para destruir pruebas y basó su acusación en esa supuesta destrucción de esas pruebas.
6) Se insiste en la dinamita de ETA, aunque la sentencia afirmara: “toda o gran parte de la dinamita es Goma2 ECO procedente de la mina Conchita y que los restos encontrados también podrían proceder de ese lugar”.
7) 14 jueces han denegado la reapertura de la investigación que abrió Torres-Dulce, a pesar de no contar con ningún informe policial que lo avalara. El Supremo avaló la sentencia del 11-M y Torres-Dulce finalmente la ha cerrado.
Diez años después, el bulo de la teoría de la conspiración se cae y así lo avalan también varios altos cargos de este gobierno. Atrás quedan las investigaciones iniciales buscando llamadas telefónicas entre etarras e islamistas. Nada. Trashorras (a quien se le grabó diciendo: “Si El Mundo paga, les cuento la Guerra Civil”) también se arrepiente, desde la cárcel, de haber alimentado el bulo. Lo encontrado en la furgoneta eran detonadores y el resto pequeños objetos sin valor. Los temporizadores coincidían con los de ETA y los tenía el dueño del piso porque se dedicaba a reparar electrodomésticos. Buscando la relación con ETA se apoyaron en ácido bórico que se utiliza también como matacucarachas. Pruebas, todas ellas, muy débiles y sin base pero apoyadas por grandes titulares de prensa.
La realidad es que Aznar temía perder las elecciones, como le apuntaba Arriola, si se confirmaba que el ataque era de islamistas y creía ganarlas si era obra de ETA. Por eso él y Acebes, cuando la policía miraba hacia el islamismo radical (ese mismo día por la tarde y al día siguiente) ellos y El Mundo seguían alimentado una teoría de la que aún no se han descabalgado del todo. Después vino el desprestigio a policías y jueces y el incremento de dudas novelescas (como los asesinatos del abogado y las prostitutas en Castellón). El Mundo, sin Pedro J. ya se ha desenganchado de la teoría que alimentó. Jiménez Losantos, Aznar, Acebes y otros prefieren seguir instalados ahí pero sin aportar ninguna prueba y despreciando las que hay contra los islamistas que son mucho más consistentes –tal como acaba de decir Gómez Bermúdez- “que las que los jueces han dado como válidas para condenar a muchos etarras.”
La teoría conspirativa ha ido contra el TEDAX, peritos, policía científica, subdirector general de la policía, comisario de información, la UCD de la Guardia Civil, víctimas, fiscales, jueces,… contra todos. Pedir perdón sería admitir que han mentido. Demasiado fuerte.
Por muchas veces que se repita o se le condene judicilmente a Otegi, éste no es ETA. Seguro que estamos de acuerdo, que porque tus planteamientos políticos pacíficos, coincidan con los de terroristas, golpistas, asesinos, etc. no quiere decir que lo seas. Otegi como cualquiera, marxista, persona, político, tiene sus defectos. Pero es de los que más hace por el fin de ETA.