Javier López y Rita. La “despertá fallera”
JAVIER LOPEZ MADRID
Es un empresario de éxito. Está en la dirección de una de las grandes constructoras de este país. Se mueve como pez en el agua por Consejos de Administración de empresas y patronatos. En Bankia recibió una tarjeta con la que atendía las pequeñeces de la vida por las que es necesario pagar, como relojes de oro, ir de vacaciones, pasear en yate, realizar fiestas o comer en restaurantes cargados de estrellas Michelin.
La tarjeta se la facilitó otro personaje de éxito llamado Don Rodrigo Rato. Con ella Javier López dispuso de 40.000 euros.
Javier tiene muchos contactos. La Reina y su Rey están incluidos en su círculo.
Como buenos amigos comparten confidencias y comentan que “este país se ha puesto muy difícil” debido a que hay jueces muy puñeteros que están poniendo en cintura a personas de clase, honestas y honorables. Unos jueces que no saben que lo primero es la amistad y que la amistad se cimienta sobre favores: “Yo conozco al presidente del tribunal. Él podrá ayudar a tu hijo en las oposiciones para Registrador de la Propiedad” “Está a punto de salir una concesión urbanística. Le he dicho al alcalde que irás a hablar con él para ayudarle a fijar el pliego de condiciones y así podrás concursar con garantías”.
Las cosas funcionan así, pero hay jueces que sobreactúan. “Tendré que ir, en adelante, con más cuidado” le dijo López Madrid a su amiga la Reina y la Reina entendió a su “compi” y le dio ánimos. El Rey se sumó a la conversación por whatsapp para añadir ¿Comemos juntos?
RITA
Rita está fuera de sí. ¡Ella que tanto ha hecho por Valencia! Ahora contempla como unos descamisados de bajo nivel le han arrebatado su castillo.
¿Cómo pueden haberme dejado sin mi coche oficial y sin mi sueldo unos impresentables vestidos de una forma tan grosera? Primero se ensañaron con mis bolsos ¿Nos hemos vuelto locos? ¿Qué tiene de malo regalar un Vouitron o seis trajes? Luego se metieron con lo que gastaba en agasajos a mis amigos. Luego con que si me iba a Londres a una suite ¿Nunca entenderán que me debo a mi cargo y que el cargo requiere decoro y mostrar nivel?
No han acabado ahí -sigue diciendo Rita- Se han metido también con mi sueldo. “Que si soy alcaldesa mejor pagada de España” ¡Pues claro! ¿No entenderán que una ciudad del nivel de Valencia debe tener sueldos de nivel? ¿No lo merece Valencia? ¿No era un cargo de mucha responsabilidad y de altura mientras yo fui alcaldesa?
No contentos con todo eso, dicen ahora que yo recaudaba dinero para las campañas electorales del PP ¿Qué dicen? Yo he tenido subordinados que se dedicaban a hacer su trabajo. Ellos sabrán a qué empresas les cobraban y que compensaciones les daban. Pero si lo han hecho ¿Qué hay de malo en ello? Las cosas funcionan así. Favor por favor y todos tan amigos. A algunas empresas las ayudábamos a ganar dinero y ellas, a cambio, nos ayudaban a ganar las elecciones. No hay nada malo en ello y si lo hubiera será culpa de mis subordinados por no haber actuado bien.
Mi poder, nuestro poder, -medita Rita- es un poder natural que nada tiene que ver con el de quienes con malas artes me lo han usurpado. Nosotros sabemos ejercerlo. Con la amistad como valor, sabemos movernos hasta para aplazar un partido de futbol cuando uno de los nuestros nos lo pide porque le coincide con una celebración familiar. Sabemos gastar de forma elegante. Sabemos nombrar a Julio Iglesias embajador de Valencia. Sabemos pagar y cobrar en A, en B y en C. Sabemos estar a la altura… y no como otros.
Rajoy ha dicho que se siente satisfecho con las explicaciones de Rita a la que protege con todas sus fuerzas, no sea que cante y empiecen a llover sapos. La pobre, con sus nueve concejales imputados y virtualmente apartados del partido, se encuentra desubicada. No entiende por qué la quieren obligar a que vaya a la Cámara Alta si ella está adscrita al Senado solo para protegerse y cobrar.
Rita, en momentos depresivos, desconsolada, medita exiliarse a Burriana recordando que en esa ciudad se lo pasó muy bien paseándose por los supermercados y haciéndose fotos el día en el que unos anti sistema le arrebataron el poder, privándonos a todos de disfrutar de su imagen y de las conmovedoras palabras que solía pronunciar (no solo en fallas) desde el balcón del Ayuntamiento.
LA DESPERTÁ FALLERA
Agradeciendo que el entusiasmo de algunos por la puñetera tradición de tocar los cataplines con la “despertá” fallera se haya limitado, este año, al día de S. José, he de insistir en que es hacer la puñeta ponerse a tirar petardos a las 7 de la mañana. Un vez más he decir que no tienen ninguna gracia el “tronadors” y menos a esas horas. Para los fans de esta gamberrada unos versos:
Quina gracia té senyors
La despertà amb tronadors?
Son ganes de fer la ma
a la gent amb son, “cansá.”
En un poble ple de gent
hi ha xiquets i gent malalta
i els sorolls desustanciats
no ens fan gens, gens de falta.
..I si a algu l´iagrada l´acte
qu´els tire dins de sa casa
i que ho grave ben gravat
Per escoltar-ho quan vullga
També amb son i mal de cap.
Buen articulo, ligado, claro y resuelto. Digno de mejor entorno. Gracias.