elperiodic.com
SELECCIONA IDIOMA
Valencià
Por J. P. Enrique
Solo es una opinión... - RSS

Si yo fuera Rajoy

    Si yo fuera Rajoy hubiera hecho un programa de gobierno, lo habría presentado en el Parlamento y en él se diría, con sentido común, las medidas que voy a tomar: 1) Voy a reducir la Administración empezando por quitar todas la Diputaciones. 2) Voy a quitar burocracia en Madrid, una ciudad gobernada, a la vez, por un Alcalde de Madrid  y una Presidenta de la misma Comunidad. 3) Voy a quitar las TV autonómicas 4) Voy a… Es decir, medidas concretas y no eslóganes como: “Márchese ZP”.

    En mi propuesta de gobierno  daría respuestas claras a las preguntas de la ciudadanía: ¿Qué va a pasar con el despido? ¿Qué con las pensiones? ¿Qué va a pasar con la ley de Dependencia?  ¿Se va a bajar/subir el IVA? ¿Qué hacer con el bono social que reduce el recibo de la luz a las personas con menores ingresos? ¿Qué con los sueldos de los funcionarios? ¿Qué va a pasar con la ausencia de publicidad de  TVE? ¿Se le va a mantener, reducir o ampliar el 0,7 que recauda la Iglesia de las declaraciones de renta?  ¿Se va a bajar/subir el IBI?  ¿Va bajar/subir el impuesto sobre gasolina, alcohol y tabaco? ¿Se va a reintroducir la desgravación por compra de vivienda? ¿Se va a establecer un copago en sanidad? Es de sentido común que yo dé respuesta clara  a tantos interrogantes.

    El peligro es que, diciendo lo que voy a hacer, espante a mucha gente, pero nadie me podría tachar de haber obtenido el poder engañando a los votantes, que es lo que piensan los alemanes de Merkel, los ingleses de Cameron y los franceses de Sarkozy.

    Yo, sería coherente y no pregonaría que “hay que suprimir ministerios” y diría poco después  incoherentemente que “cuando yo mande restauraré el de Agricultura”. Tampoco  propondría, con tanto desempleo, que un parado “pueda cobrar su pensión y seguir trabajando”. Tampoco hablaría demagógicamente  de recortar subvenciones a partidos y sindicatos y poco después cifrar esos recortes en tan solo 12 millones. Del mismo modo, si pienso que el Estado no debe intervenir en la economía, es razonable que rechace el plan E de Zapatero, pero no lo es que aplauda el  Plan Confianza  de Camps, que es lo mismo con otro nombre.

    Si yo fuera Rajoy no diría que tengo la receta para salir de la crisis que “ya aplicó Aznar” porque la receta de Aznar del ladrillo y el endeudamiento está colapsada y para muchos años. También es imposible el mayor endeudamiento y la venta de empresas públicas porque ya no quedan.

    Si yo fuera Rajoy diría con absoluta franqueza que no deben haber fosas comunes innominadas. Haría más, ordenaría, de forma razonable y sensata,  que al que fue maestro y se le fusiló por ser republicano, se dijera de él que fue una persona honesta. Punto. Sin que querer revivir nada, sin buscar ninguna revancha. Dando ese paso lograría convertirme en un partido europeo desligado del franquismo.

    Revisaría, si yo fuera Rajoy, a los jueces en profundidad después de saber que el día siguiente del golpe del 23-F un magistrado del Tribunal Supremo propusiera hacer un manifiesto desde la Fiscalía de Madrid, defendiendo la democracia y fuera rechazado por 27 votos contar 3. “Joder cómo está la tropa de jueces de la justicia”  -me diría- y acto seguido empezaría a depurar la judicatura.

    Ante la menor duda lo mejor -me diría-  es apartar de mi partido, asumiendo el coste político, a cualquier persona sobre la que haya dudas de corrupción, porque es necesaria la presunción de decencia. Luego la justicia que hable y que señale inocentes o culpables. Sombras de duda, dentro del partido,  ninguna. Es de lógica, de sentido común. No puede ser que 1000 corruptos manchen un partido de 700.000 afiliados.

    Yo, como Rajoy hizo, aplaudo que el partido forzara la dimisión de un ministro llamado Bermejo por compadrear con un juez en una cacería, pero miraría a la Comunidad Valencia y diría otra vez “joder que tropa”. Puesto manos a la obra, no permitiría que Fabra permanezca ahí después de lo que todos sabemos, ni que Camps ahí siga después de haber usado el dinero público para beneficiar a intereses privados, ni que ahora Ripoll… y al lado de ellos  muchos cargos  del PP en la Comunidad. Por supuesto no permitiría que los Blasco-Camps financiaran  un pozo en Nicaragua por 400.000 euros cuando no vale ni la décima parte. Ni que a la TVV le costara 14,7 millones retransmitir la visita del Papa (nada que ver con el millón que costará a TV3 y TVG cubrir similar evento). Ni que el presupuesto para los cacareados “edificios emblemáticos”  se lleve para la Ciudad de las Artes 409 millones de euros, casi tanto como el Servef. Ni que en Valencia, con sus políticas, sean campeones del paro. Ni que sean obstruccionistas con las leyes del Estado.  Después de contemplar todo lo que ocurre en la CV, me preguntaré porqué no aplicamos el Código Ético del PP. De ser Rajoy, yo hubiera dicho con claridad: “Siento una gran tristeza por la situación que están recogiendo los medios de comunicación y que todos conocemos”. Debería de haberlo dicho yo,  pero lo ha dicho Eduardo Zaplana.

    Si yo fuera Rajoy no permitiría que Cospedal “labienpagá” acusara de escuchas ilegales sin pruebas, ni que Rita la valenciana acusara también sin pruebas a la policía de espiarla, ni que algunos vomitaran machismo, ni que González Pons hablara  del Gürtel como una trama contra el PP, ni protegería a  los implicados, ni toleraría que el director de TVV (con un déficit de escándalo)  cobrara más que los ministros de Madrid, ni que sus tres administradores únicos se lleven más de 100.000 euros, ni… Y con Camps a mi lado le preguntaría que pasa con los empresarios de la construcción valencianos que dicen creer en el libre mercado y en la competencia y  se reparten las obras públicas: “Esta me toca a mi”. ¡Joder que tropa!.

    Si yo fuera Rajoy en el debate sobre el Estado de la nación de Mayo de dos mil seis, previniendo la que nos iba a caer encima, lo hubiera dedicado a hablar de la crisis y no de terrorismo. En el año siguiente, ya con una crisis palpable en el debate, el tres de julio, no hubiera vuelto a hablar de la política antiterrorista de Zapatero.

    Si yo fuera Rajoy no me opondría a que se dieran ayudas de subsistencia a parados de larga duración ni acusaría a éstos de vivir del Estado, porque es de sentido común pensar que ellos no van a ser el motor de relanzamiento de nuestra economía y lo están pasando mal.

    Si yo fuera Rajoy no permitiría que los míos se ensañaran con los inmigrantes demostrando que soy creyente de verdad, de los que aman al prójimo. Siendo coherente recordaría la circular de 1997 que escribí como ministro de Administraciones Públicas: "El padrón debe reflejar el domicilio de todas las personas que habitan en su término y, de la misma manera que no debe controlar la legalidad o ilegalidad de la ocupación de la vivienda, tampoco debe realizar ningún control sobre la legalidad o ilegalidad de la residencia en España”.

    Si yo fuera Rajoy expulsaría a la extrema derecha de mi partido aun a riesgo de perder un puñado de votos.

    Tal vez si yo, siendo Rajoy hubiera actuado de otro modo, mi imagen no estaría tan baja, con el 83% de rechazo, tanto como el denostado Zapatero.

    So yo fuera Rajoy no duraría una semana como dirigente del PP porque me echaría el ala dura del partido; la misma gente  que goza de demasiada influencia en esta formación política y que yo -siendo Rajoy- debería de haber expulsado hace tiempo. Con  esa tropa  es muy difícil -me diría- que yo pueda aplicar el sentido común.

     

    Elperiodic.com ofrece este espacio para que los columnistas puedan ejercer eficazmente su derecho a la libertad de expresión. En él se publicarán artículos, opiniones o críticas de los cuales son responsables los propios autores en tanto dirigen su propia línea editorial. Desde Elperiodic.com no podemos garantizar la veracidad de la información proporcionada por los autores y no nos hacemos responsables de las posibles consecuencias derivadas de su publicación, siendo exclusivamente responsabilidad de los propios columnistas.
    comentarios 16 comentarios
    Jo
    Jo
    08/11/2010 02:11
    Incompetencia manifiesta de los grandes

    Como usted lo plantea, parece que sean los partidos nacionalistas los culpables de la incapacidad manifiesta de los dos grandes partidos para llegar a acuerdos. Si PP y PSOE no se aclaran entre ellos para llegar a acuerdos....llega la ratita y se lleva el queso. ¿Se ha planteado que quizá no se merezcan ese 80% de los votos? Usted lo que plantea es un bipartidismo puro y duro. ¿Pero que haríamos entonces con las voluntades del 20% de los votos, o sea, con el voto nacionalista? ¿o propone usted otro gran café para todos "i mutis"?

    Subir