¿Son los animales seres sintientes?
Un ser “sintiente” es aquel que es consciente y siente emociones como placer, miedo, angustia, dolor o frustración. En España los animales ya son seres sintientes a todos los efectos legales. Desde enero de 2022, la ley los reconoce como seres vivos dotados de sensibilidad y no podrán ser abandonados, embargados, hipotecados, maltratados o apartados de sus dueños como si fueran simples objetos. Es cierto que los animales son diferentes a los seres humanos, pero ellos, también, viven sensaciones. No seguí la aprobación de la ley. Así que desconozco como fundamentaron la condición de ser sintiente de los animales. No soy ni veterinario, ni tengo conocimientos profesionales para valorar la sensibilidad de los animales. Pero contaré algunos hechos de los cuales deduzco que la facultad de sentir los animales, debe estar fuera de toda duda.
Hace un par de semanas tropecé en la red, con un video del caso de una cuidadora de caballos del Reino Unido. La mujer se veía dolorida por haber roto con su pareja. Así que en la misma cuadra se sentó, a llorar sus penas. Un caballo se percató, se le acerco y con el cuello y la cabeza le envolvió el cuerpo, como queriéndola abrazar y acariciarla. Ello me trajo a la memoria alguno de los videos que circulan por la red, donde los animales expresan una sensibilidad, para mí, desconocida.
El primer video que me impactó, fue el de dos perros que intentaron cruzar una autopista China de 5 carriles. Uno de los perros muere atropellado en el acto. El otro perro, retrocedió para no ser atropellado. Luego al ver su compañero muerto al medio de la autopista, se situó en un punto alto, al lado la carretera. Observó el tráfico que venía, hasta que vio un hueco que le dio tiempo para entrar en la carretera y arrastrar a la orilla, al compañero muerto. Es evidente, que ante un perro muerto no hay nada que hacer. Por ello, sacarlo de la carretera para que su cuerpo no sea destrozado demuestra sensibilidad y respeto a sus semejantes muertos.
En la red hay un montón de videos, de animales salvajes, haciendo vida independiente en plena selva o reserva natural. Cuando se trata de animales que se encuentran con personas que les cuidaron en años anteriores, les abrazan expresando un afecto, ternura y alegría que pocas personas son capaces de expresar ante sus seres queridos. Muchas personas habrán visto el caso del bebe, que cayó en el foso de un gorila en un Zoo de USA. El gorila cogió y trató al bebe con la misma delicadeza que una madre trata a sus hijos. Cualquiera que tenga la experiencia de ver el trato de los perros con los bebes, habrá podido ver la delicadeza que los perros tratan a los bebes, para no hacerles daño. Y si el bebé, duerme o está enfermo, procurará no hacer ningún ruido. El caso es que hace poco tiempo he sido sorprendido por el video que se ve un niño de un año, que se agarra de los barrotes de una ventana sin rejas, para asonarse en ella. Resulta que cada vez que el niño intenta asomarse a la ventana, el gato salta a la ventana y araña las manos del niño para que se suelte de los barrotes y con consiga asomarse a la ventana. Es la primera vez en la vida que veo a un gato protegiendo a un bebé. Que un perro proteja un niño no es nada extraordinario. Es cierto, que los casos más sorprendentes de afecto y sensibilidad de animales hacia las personas, son de mamíferos. En internet se pueden encontrar videos donde se ven a familias que tiene un toro, en el jardín de la casa o el campo, y juegan y se abrazan con él, tanto los mayores como niños, como se hace con un perro de la familia. Alguna de las personas mayores de Borriana recordaran, que, en los años 50, en un acto de “Bous al carrer”, estando el toro al medio de la plaza invistiendo a los que le toreaban, Timoteo, padre de Juanvi Broch, que vivían al carrer Burgà, saludó de lejos al toro, esté le reconoció, se acercaron mutuamente, se saludaron con signos de satisfacción y luego cada cual siguió su camino. Si ello fue posible es porque Timoteo cuidaba a toro, y, seguramente, con respeto. Por Facebook hay una foto del encuentro del toro y Timoteo al medio de la plaza. Está anécdota se cuenta haber ocurrido en otros pueblos con otros protagonistas. Ello demuestra que el respeto y afecto que los animales tienen por las personas, depende de lo que reciben de ellas.
A toda clase de mamíferos les gusta ser abrazados por personas, eso lo tengo claro desde hace muchos años. En internet podemos ver, a elefantes, cerdos, burros, leones etcétera, lo satisfechos que se sienten cuando son abrazados por una persona. Pero me siento sorprendido por los innumerables videos que circulan por la red en los que se puede apreciar la satisfacción de una variedad infinidad de animales de toda clase cuando son abrazados por personas. Pero, además, se ve que buscan el abrazo. Es evidente, que si lo buscan es porque están acostumbrados a recibirlo y porque aprecian el afecto y respeto de las personas. Así las cosas, cada día entiendo menos a los que encuentran diversión del maltrato, la tortura o la muerte, de un animal