elperiodic.com
SELECCIONA IDIOMA
Valencià
Por María José Navarro
Picos Pardos - RSS

Encierro se escribe con E

    Encierro se escribe con E, puesto que es su primera letra, pero también debe escribirse con la E de Esperanza, Equilibrio, Equidad y Empatía, porque para poder sobrellevar lo primero, nos hacen falta grandes dosis de las otras cuatro.

    Esperanza. El nombre de la calle donde nací y en la que vivo actualmente… En estos días de confinamiento, la calle Esperanza ha destacado por sus actividades para entretener a los niños y niñas que en ella viven, preparando cometas y colgándolas de balcón a balcón, haciendo meriendas de ventana y celebrando cumpleaños colectivos, compartiendo música, alegría y  manteniendo vivas las tradiciones de estas fechas. Pero la esperanza es mucho más que una calle en la que la vecindad ha estrechado lazos, uniéndose contra la soledad y el aislamiento, es un sentimiento que nos ayuda a seguir adelante, pensando que cada día que pasa es un día menos de confinamiento, un día menos para poder abrazar, un día más cerca para ver a nuestros seres queridos…

    Equilibrio. Otra de las E de este encierro es el equilibrio… el que necesitamos para poder hacer frente a todas las noticias tristes que nos acompañan estos días, en los que las personas fallecidas se cuentan por miles. Personas a las que no se las ha podido acompañar en sus últimos momentos de vida, ni despedir rodeadas de su familia y amistades. Tristeza y miedo a partes iguales. Pero también la naturaleza necesitaba de ese equilibrio, y en estos días, en los que los humanos no estamos asfixiándola con nuestra contaminación, parece que todo va ajustándose y la naturaleza renace, toma fuerzas y se la vuelve a ver en todo su esplendor, demostrándonos que si nos apartamos, ella puede seguir ahí y regalarnos un cielo limpio, con pájaros a los que se vuelve a escuchar en las ciudades, con delfines en nuestras costas y esa paz que hacía tanto necesitaba…

    La que le sigue es la de Equidad. A nadie se le escapa que esta crisis sanitaria viene acompañada de una crisis económica y social en la que ya estamos inmersos. Para poder salir de la crisis sanitaria deberemos confiar en nuestro sistema, poniendo en valor la estructura con todos sus profesionales, sanitarios e investigadores, y dotándoles de los medios necesarios para que puedan trabajar, ahora y siempre, sin que vuelva a planear sobre la sanidad pública la sombra de la privatización, los recortes y el desprestigio. También hemos podido comprobar cómo son los sectores primarios (alimentación, limpieza, agricultura, transportes…) los básicos para poder mantener a la sociedad y paradójicamente, esos trabajadores y trabajadoras son los menos valorados y peor pagados.

    Para salir de la crisis social será preciso poner a las personas en el centro de las intervenciones, en el centro de los programas, en el centro de la política, con los recursos económicos adecuados para que las necesidades sean cubiertas equitativamente y mejorando la dotación de los Servicios Sociales con los profesionales esenciales para poder trabajar con todas esas personas de manera directa y sin dejar a nadie atrás.

    Empatía. Esa capacidad de percibir y compartir los sentimientos de otras personas y que en estos difíciles momentos es tan necesaria, para evitar esos mensajes que hemos podido ver en algunos sitios, en los que se mostraba una actitud de rechazo y hostilidad hacia algunas personas, por trabajar en lugares expuestos a la enfermedad, o a personas enfermas que han pasado la cuarentena en su domicilio, sin tener a nadie que les llevara alimentos o medicamentos… No quiero pensar lo que sucederá en la siguiente fase, cuando nos permitan comenzar a salir y volvamos a compartir espacios comunes, si no somos capaces de desarrollar la empatía necesaria, para entender que hay personas vulnerables que precisarán de nuestra colaboración y paciencia.

    Dicen que el encierro nos ha hecho cambiar a mejor, así que me gustaría pensar que vamos a ser capaces de desarrollar la empatía que nos permita ser equitativos, manteniendo el equilibrio personal y ambiental y con el espíritu repleto de esperanza, que nos ayude a superar todos obstáculos. ¿Será por haber nacido en la calle en la que vivo?

    Elperiodic.com ofrece este espacio para que los columnistas puedan ejercer eficazmente su derecho a la libertad de expresión. En él se publicarán artículos, opiniones o críticas de los cuales son responsables los propios autores en tanto dirigen su propia línea editorial. Desde Elperiodic.com no podemos garantizar la veracidad de la información proporcionada por los autores y no nos hacemos responsables de las posibles consecuencias derivadas de su publicación, siendo exclusivamente responsabilidad de los propios columnistas.
    Subir